Yakarta (VNA)- Según la última evaluación del Banco Asiático de Desarrollo (BAD), se espera que la economía de Indonesia crezca un 4,8 por ciento en 2023 y un 5,0 por ciento en 2024.
El director nacional del BAD en Indonesia, Jiro Tominaga, dijo que el auge de las exportaciones de productos básicos impulsó el crecimiento al 5,3 por ciento en 2022, compensando la modesta demanda interna.
Países como Indonesia, que dependen en gran medida de las exportaciones de materias primas, se beneficiaron de los altos precios en 2022 cuando las economías reabrieron tras la pandemia de la COVID-19 y aumentó la demanda de metales, combustibles fósiles y otras materias primas.
Mientras tanto, las tensiones en Rusia y Ucrania y otros acontecimientos geopolíticos interrumpieron el suministro de algunos bienes y también contribuyeron al aumento de los precios.
El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Indonesia se mantuvo bien el año pasado, en marcado contraste con la desaceleración significativa en muchas economías desarrolladas y algunas emergentes. El país del sudeste asiático no se ha visto afectado cuando la inflación global sigue aumentando.
Además del corto plazo, el informe del BAD destacó las preocupaciones a mediano y largo plazo con la pérdida de ingresos de los trabajadores y la escolarización presencial de los niños durante la pandemia que podría deprimir las tasas de crecimiento potencial./.
El director nacional del BAD en Indonesia, Jiro Tominaga, dijo que el auge de las exportaciones de productos básicos impulsó el crecimiento al 5,3 por ciento en 2022, compensando la modesta demanda interna.
Países como Indonesia, que dependen en gran medida de las exportaciones de materias primas, se beneficiaron de los altos precios en 2022 cuando las economías reabrieron tras la pandemia de la COVID-19 y aumentó la demanda de metales, combustibles fósiles y otras materias primas.
Mientras tanto, las tensiones en Rusia y Ucrania y otros acontecimientos geopolíticos interrumpieron el suministro de algunos bienes y también contribuyeron al aumento de los precios.
El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Indonesia se mantuvo bien el año pasado, en marcado contraste con la desaceleración significativa en muchas economías desarrolladas y algunas emergentes. El país del sudeste asiático no se ha visto afectado cuando la inflación global sigue aumentando.
Además del corto plazo, el informe del BAD destacó las preocupaciones a mediano y largo plazo con la pérdida de ingresos de los trabajadores y la escolarización presencial de los niños durante la pandemia que podría deprimir las tasas de crecimiento potencial./.
VNA