La fábrica de la empresa YKK Vietnam (Fuente: Internet) Hanoi (VNA) - Aunque Vietnam ha sufrido tres brotes de COVID-19 con muchos desarrollos complicados, la mayoría de las empresas de inversión extranjera directa en el país mantiene la producción y los negocios en la nueva situación gracias a la prevención eficaz de la epidemia.
La declaración médica y el chequeo de temperatura de los trabajadores son obligatorios en estas empresas. Muchas medidas preventivas como lavarse las manos con antisépticos, mantener la distancia y limitar la comunicación cuando no es necesario han ayudado a las empresas a mantener sus operaciones estables durante los tres brotes del COVID-19.
Yuki Maruyama, director de producción de la empresa YKK Vietnam, notificó que su entidad cumple estrictamente las regulaciones de prevención de epidemias de las autoridades de salud y la administración de zonas industriales local, por lo que hasta el momento las actividades de producción no se han interrumpido. En 2020, la compañía muchos pedidos, por lo que su negocio creció bien, destacó.
La declaración médica y el chequeo de temperatura de los trabajadores son obligatorios en estas empresas. Muchas medidas preventivas como lavarse las manos con antisépticos, mantener la distancia y limitar la comunicación cuando no es necesario han ayudado a las empresas a mantener sus operaciones estables durante los tres brotes del COVID-19.
Yuki Maruyama, director de producción de la empresa YKK Vietnam, notificó que su entidad cumple estrictamente las regulaciones de prevención de epidemias de las autoridades de salud y la administración de zonas industriales local, por lo que hasta el momento las actividades de producción no se han interrumpido. En 2020, la compañía muchos pedidos, por lo que su negocio creció bien, destacó.
El año pasado, en comparación con las sucursales en otros países, la empresa en Vietnam de este grupo ha crecido de manera más efectiva. El número de empleados de la firma se mantiene en más de mil personas.
A su vez, Chuang Liang Lun, de la empresa Bright International Vietnam, subrayó que el país indochino ocupa el segundo lugar mundial después de Nueva Zelanda en la eficiencia de la lucha contra el COVID-19 y aunque hay que aumentar los costos dedicados a las soluciones antiepidémicas, se logra mantener las operaciones y se plantea expandir la producción en el futuro cercano.
Según muchas empresas de inversión extranjera directa (IED), las autoridades vietnamitas no solo han adoptado drásticamente las medidas preventivas, sino también han apoyado a las empresas a resolver los problemas.
En tanto, Tran Van Kien, jefe de la Administración de Zonas Industriales de la provincia de Ha Nam, ratificó que su localidad continuará colaborando con los departamentos y agencias para garantizar la prevención y el control del COVID-19.
Según el Departamento General de Aduanas, el valor total de importación y exportación de las empresas de inversión extranjera directa alcanzó en enero casi los 40 mil millones de dólares, aumentos respectivos de dos y 60 por ciento en comparación con el mes anterior y el mismo período del año pasado.
Estas cifras muestran que las firmas se han adaptado bien a la nueva normalidad para cumplir el doble objetivo de luchar contra el COVID-19 y promover el desarrollo socioeconómico./.
VNA
