Hanoi (VNA)- El establecimiento oficial de la Comunidad Económica de la ASEAN (AEC, en inglés) el 31 de diciembre de 2015 marcó un hito en el proceso de formación y desarrollo del bloque y a la vez de un paso clave en la integración internacional de Vietnam.
El mayor beneficio que la CEA traerá a Vietnam es la creación de un entorno regional de conexión cuando todas las barreras arancelarias y no arancelarias se eliminen, en un mercado de 625 millones de habitantes con un Producto Interno Bruto de dos billones 600 mil millones de dólares.
Actualmente, la ASEAN es el mayor socio comercial de Vietnam y también su mayor fuente de inversiones extranjeras. Por esa razón, la formación de la CEA brindará muchas oportunidades a la economía vietnamita.
El subjefe del Comité Nacional para la Cooperación Económica Internacional del Ministerio de Industria y Comercio, Nguyen Son, evaluó: “Primero, la CEA es un entorno regional con conexión que representa muchas oportunidades de negocios. En segundo lugar, la ASEAN en general y los países miembros en particular implementan varios acuerdos de libre comercio. Al invertir en este mercado, las empresas vietnamitas no sólo tendrán la oportunidad de acceder al mercado de la ASEAN, sino también a los mercados miembros del bloque regional que cuentan con acuerdos de libre comercio. Con una red amplia de estos acuerdos, la ASEAN se está haciendo más competitiva para atraer inversiones extranjeras respecto a otras regiones”.
La formación de la Comunidad Económica de ASEAN genera tanto oportunidades como retos para la economía vietnamita. Sin embargo, ser miembro de la CEA también significa que Vietnam afrontará nuevos desafíos.
La formación de la comunidad económica de la ASEAN implica que todos los mercados son iguales. Si un mercado está en desventaja, se quedará atrás respecto a los otros debido a la alta competencia interna. Si el mercado vietnamita no es lo suficientemente atractivo para los inversionistas, estos se trasladarán a otros países de la ASEAN con más ventajas en cuanto a las inversiones, el volumen del mercado y la escala de producción.
Aunque Vietnam ha mejorado su posición en la clasificación de competitividad del Foro Económico Mundial, en ese indicador nunca ha superado a los seis primeros miembros de la ASEAN.
En las evaluaciones de las cámaras de comercio sobre el ambiente de inversiones y negocios de los países integrantes de la ASEAN, Vietnam ocupa el lugar más bajo en tres áreas: política de transparencia, políticas fiscales y aduana.
En referencia al comercio de bienes, el mayor desafío para el país es que para el 2018 debe eliminar los aranceles para el siete por ciento de las líneas arancelarias sensibles. Estas líneas arancelarias se califican como “altamente sensibles”, que son las mercancías nacionales de competitividad débil.
Otra cuestión es que las empresas vietnamitas se muestran pasivas ante el establecimiento de la CEA. Una encuesta del Instituto de Investigación del Sudeste Asiático revela que el nivel de atención del sector empresarial de Vietnam es el más bajo en el bloque.
El director del Centro de la Organización Mundial del Comercio de Ciudad Ho Chi Minh, Pham Binh An, opinó que actualmente las empresas tienen una información muy limitada sobre la comunidad económica de la ASEAN, lo que constituye el mayor desafío porque si las entidades vietnamitas no pueden aprovechar sus oportunidades, estaremos en desventaja cuando entremos en este mercado común.
Las empresas vietnamitas y los planificadores deben tomar conciencia de los nuevos desafíos para aprovechar las oportunidades.
En una conferencia efectuada a comienzos de este año tras la fundación de la CEA, el viceprimer ministro y canciller de Vietnam, Pham Binh Minh, enfatizó en la necesidad de crear un cambio de conciencia desde el nivel macro hasta el sector empresarial y cada ciudadano, sobre esta comunidad. A nivel macro, en el proceso hacia la formación de la CEA, Vietnam ha desplegado un plan bien preparado para su integración regional.
El viceprimer ministro destacó que cuando la ASEAN comenzó a implementar en 2009 su plan con vista a construir esta comunidad, Vietnam elaboró un proyecto sobre la orientación y las medidas para que el país participara en la cooperación hasta el 2015, así como acciones gubernamentales.
En la estrategia de integración internacional, también trazó orientaciones para construir esta comunidad junto con otros países miembros de la ASEAN y desplegar la visión hacia el 2025 con los contenidos prioritarios, remarcó.
No obstante, además de las macropolíticas, las empresas vietnamitas deben tomar iniciativas en el proceso de integración. Está claro que con una competencia cada vez más fuerte, en cuanto a los productos, el mercado y los recursos humanos de alta calidad, el sector empresarial debe estar listo para aprovechar las oportunidades de desarrollo.-VNA