Ciudad Ho Chi Minh (VNA) – La medición multidimensional de la pobreza en Vietnam identificará y calificará más exactamente a las personas en necesidad de asistencia, lo cual facilitará la elaboración de políticas propicias para cada grupo.
El viceministro vietnamita de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales Nguyen Trong Dam pronunció tal afirmación durante un seminario efectuado ayer en Ciudad Ho Chi Minh.
De acuerdo con el subtitular, durante 2016 – 2020 la pobreza se calculará no sólo por los ingresos sino también por el nivel de acceso a los servicios básicos como la educación, salud, vivienda, agua potable- higiene, ambiente e información.
A 20 años de la realización de las políticas de reducción de la escasez económica, la tasa de pobreza en Vietnam disminuyó de 58 por ciento en 1992 a 4,5 por ciento en 2015.
Sin embargo, la aplicación a lo largo de ese proceso de la medición basada en los ingresos mostró insuficiencias, pues no reflejó completamente la situación de los pobladores e incumplió la meta de desarrollo integral y sostenible, señaló.
Pratibha Mehta, coordinadora permanente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Vietnam, aseguró que el intercambio de las novedades en la medición y reducción de pobreza, así como en la provisión de servicios públicos a los grupos vulnerables ayuda al país a establecer los mecanismos adecuados y prácticos.
Durante el seminario, los participantes compartieron experiencias de Ciudad Ho Chi Minh y varios países como China, Mongolia, Malasia, Cambodia, Indonesia y Pakistán en el incremento de la administración estatal para la aplicación de la medición multidimensional de la pobreza.
El gobierno vietnamita promulgó los estándares aplicados en el periodo 2016 – 2020 para calcular la carencia económica, según los cuales para medir la pobreza se considerarán dos criterios principales.
El primer se concentra en el ingreso de cada individuo. Se entiende como “línea de pobreza” la situación en que los ingresos cubren las necesidades básicas para adquirir un adecuado estándar de vida.
Otro criterio abarca los indicadores del acceso a los servicios básicos como salud, educación, vivienda, agua potable, higiene ambiental e información.
Se trata del nivel de educación de los adultos y la participación en la escuela de los niños; el disfruto de los servicios de salud y el seguro médico; la calidad de vivienda y la superficie per cápita; la potabilidad de agua utilizada en la vida y el tipo de baño; el uso de los productos telecomunicativos y los medios que sirvan para el acceso a la información. – VNA