Hanoi (VNA) - El subsecretario general de Asuntos Humanitarios y Coordinador de Ayuda de Emergencia de la ONU, Martin Griffiths, anunció la distribución urgente de 12 millones de dólares del Fondo Central de Respuesta a Emergencias a Filipinas para apoyar a ese país asiático en la respuesta al tifón Rai.
Según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, esa asistencia financiera ayudará a las 220 mil víctimas del tifón Rai a través de las medidas de apoyo en términos de alimentación, seguridad, agua y saneamiento, higiene, gestión de campamentos, albergue y logística, así como telecomunicaciones en Caraga, la región más afectada por esa tormenta.
Al intervenir en una rueda de prensa virtual, el coordinador de la ONU, Gustavo González, dijo que la mayor organización mundial iniciará hoy el plan de prioridad y apoyo humanitario, que se espera recaudará 6,5 millones de dólares para ayudar a las víctimas del tifón Rai, sobre todo a las 530 mil personas en las zonas más afectadas por ese desastre natural.
El supertifón obligó a evacuar a un total de 631 mil personas y provocó daños para unas 200 mil viviendas, señaló González, al agregar que los habitantes afectados necesitan urgentemente un refugio de emergencia, agua potable y alimentos.
Rai azotó el 16 de diciembre Filipinas con vientos de 195 kilómetros por hora, convirtiéndose en una de las tormentas más fuertes en la nación del Sudeste Asiático durante los últimos años.
La tormenta devastó diversas áreas en las regiones central y sureña de Filipinas, incluida la isla de Luzón, la más grande y poblada del país.
El presidente filipino, Rodrigo Duterte, declaró el 21 de este mes un estado de calamidad en varias regiones para acelerar los esfuerzos de socorro para las víctimas del supertifón./.
Según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, esa asistencia financiera ayudará a las 220 mil víctimas del tifón Rai a través de las medidas de apoyo en términos de alimentación, seguridad, agua y saneamiento, higiene, gestión de campamentos, albergue y logística, así como telecomunicaciones en Caraga, la región más afectada por esa tormenta.
Al intervenir en una rueda de prensa virtual, el coordinador de la ONU, Gustavo González, dijo que la mayor organización mundial iniciará hoy el plan de prioridad y apoyo humanitario, que se espera recaudará 6,5 millones de dólares para ayudar a las víctimas del tifón Rai, sobre todo a las 530 mil personas en las zonas más afectadas por ese desastre natural.
El supertifón obligó a evacuar a un total de 631 mil personas y provocó daños para unas 200 mil viviendas, señaló González, al agregar que los habitantes afectados necesitan urgentemente un refugio de emergencia, agua potable y alimentos.
Rai azotó el 16 de diciembre Filipinas con vientos de 195 kilómetros por hora, convirtiéndose en una de las tormentas más fuertes en la nación del Sudeste Asiático durante los últimos años.
La tormenta devastó diversas áreas en las regiones central y sureña de Filipinas, incluida la isla de Luzón, la más grande y poblada del país.
El presidente filipino, Rodrigo Duterte, declaró el 21 de este mes un estado de calamidad en varias regiones para acelerar los esfuerzos de socorro para las víctimas del supertifón./.
VNA