Durante los últimos tres días, multitudes de individuosacudieron a la zona de reliquias del Templo de reyes Hung para rendir homenajea sus antepasados y disfrutar de las actividades culturales celebradas en elmarco de la festividad.
De acuerdo con el comité organizador del festival, variaszonas próximas al templo organizaron la víspera una procesión de palanquín yofrendaron flores, Banh Chung y Banh Day (pasteles cuadrados y redondos de arroz glutinoso, respectivamente), ylas especialidades culinarias de sus localidades.
Ayer también se efectuaron una competencia de preparaciónde Banh Chung y Banh Giay, con la participación de 14 equipos de distintas aldeas,un festival de libros y una exposición fotográfica.
El Festival del Templo de los reyes Hung, de cinco días deduración, se prolongará hasta mañana (10 de marzo del calendario lunar).
Reconocido por la UNESCO como Patrimonio CulturalInmaterial de la Humanidad en 2012, estefestejo se convirtió en una de las celebraciones más importantes del país y hoyatrae anualmente a millones de peregrinos, tantos nacionales como extranjeros.
Todos los vietnamitas conocen la leyenda de hace cuatro mil años sobre la unión nupcial entre Lac Long Quan y Au Co, que dio a luz cien hijos. A fin de ampliar el territorio, él avanzó con 50 pequeños hacia el mar y ella se estableció en las montañas con el resto.
El hijo mayor, que iba con su madre, se quedó en Phong Chau (actual provincia de Phu Tho), fundó el Estado independiente bajo el nombre de Van Lang y adoptó el título real de Vua Hung (rey Hung), una tradición que siguieron sus 18 sucesores.
Aquel período de los 18 reyes Hung se caracterizó por el próspero desarrollo agrícola y resonantes victorias sobre los agresores foráneos. Los monarcas eligieron a la cima Nghia Linh, la más alta en la región para rezar a los genios del arroz y del sol por buen clima, abundantes cosechas y paz para todo el pueblo.
Para enaltecer sus méritos, los vietnamitas celebran el 10 de marzo del calendario lunar una ceremonia para rendir tributo a los reyes en el Templo que lleva su nombre en Phu Tho.
La zona de reliquias del Templo Hung se extiende desde la base hasta el pico Nghia Linh, con una altura de 175 metros, que alberga los templos Ha, Trung, Thuong y Gieng.
La leyenda cuenta que Au Co dio a luz en el Templo Ha, mientras el Trung fue el lugar donde los monarcas y sus generales se reunieron para tratar temas importantes del país.
Los rituales reales de oraciones tuvieron lugar en el Templo Thuong y el Gieng fue el sitio de descanso de las dos princesas del último emperador Hung cuando acompañaron a su padre en los viajes.
A pesar de los altibajos de la historia, el credo de los reyes Hung sigue manteniendo su vitalidad. Asistir al festival es como regresar al reencuentro con sus ancestros, una creencia arraigada en el subconsciente de los vietnamitas, estén donde estén.
En diciembre de 2012, el ritual que homenajea a los creadores de la nación vietnamita fue declarado por la UNESCO como herencia mundial. Se trata de la primera vez que esa institución reconoce un culto a los ancestros como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
La fecha del 10 de marzo lunar se ha convertido hoy día una auténtica fiesta nacional en este país indochino y atrae cada año a miles de peregrinos al Templo de los reyes Hung en Phu Tho, a unos 100 kilómetros de la capital Hanoi. –VNA