Hanoi (VNA)- Con 84,58 por ciento de votos a favor, la Asamblea Nacional de Vietnam aprobó hoy la Ley de Creencias y Religiones durante el segundo período de sesiones correspondiente a la decimocuarta legislatura.
Con nueve capítulos compuestos por 68 artículos, la ley recién adoptada estipula que todo el mundo tiene el derecho a la libertad de creencias y religión y puede profesar religión o no seguir ninguna. Todos tienen el derecho de ejercer prácticas religiosas y asistir a festivales religiosos.
Se permite a las organizaciones religiosas autorizadas operar conforme a sus estatutos y reglamentos; realizar actividades religiosas; publicar documentos relacionados con la religión; construir establecimientos religiosos; y recibir donaciones legales de individuos u organizaciones dentro y fuera del país.
Para garantizar el derecho a la libertad de religión, la ley prescribe claramente que el Estado respeta y protege el derecho de todos a la libertad de creencias y religión, y asegura que todas las religiones son iguales ante la ley.
El Frente de la Patria de Vietnam se responsabiliza de unir a los seguidores religiosos y no seguidores para construir la gran unidad nacional, y de informar oportunamente las opiniones, aspiraciones y sugerencias del pueblo acerca de las cuestiones religiosas a las agencias estatales competentes.
También está asignado a participar en la redacción de documentos legales sobre creencias y religión, así como actividades de supervisión de agencias, organizaciones y funcionarios públicos en la implementación de leyes y políticas religiosas.
Todas las discriminaciones por razones religiosas; y las acciones que obligan u obstaculizan a otros a seguir o no seguir la religión y las creencias; que ofenden la creencia y religión o que aprovechan las actividades religiosas para obtener beneficios son prohibidas.
La ley también prohíbe las actividades religiosas que infrinjan la defensa, la seguridad, la soberanía nacional y el orden social; dañen la étnica social, la vida personal y los bienes; ofendan el honor y la dignidad humana de otras personas; impidan el cumplimiento de los derechos y obligaciones civiles, desunan a la nación, las religiones y entre creyentes y religiosos seguidores y no seguidores. – VNA