Hanoi, 2 feb (VNA) La aldea Choa, ahora llamada Lac Trung, en la provincia norvietnamita de Bac Ninh, es afamada por el oficio tradicional de fabricar el incienso negro, producto favorito durante los días del Tet, o el Año Nuevo Lunar. 

Aldea de inciensos ocupada en visperas de Ano Nuevo Lunar hinh anh 1Foto de ilustración (Fuente: VNA)

Son los momentos más ocupados en la localidad las vísperas del Tet, que este año cae en comienzos de febrero. El negro peculiar del producto proviene de la gomorresina de un específico tipo de bálsamo. Al quemarse despide un aroma muy agradable y crea una atmosfera solemne y a la vez acogedora para las familias. 

Dao Sy Oanh, residente de la aldea Choa, provincia de Bac Ninh, heredó este oficio de sus ancestros. En estos días todos los miembros de su familia participan en la producción, para poder cubrir la creciente demanda. 

“En las vísperas del Tet vendemos centenares de miles de inciensos. La demanda es alta, así que debemos movilizar a más trabajadores para cumplir los contratos.”, precisó. 

La familia de Tran Thi Bay también se dedica a este oficio. Gracias a la asistencia de máquinas, produce cada año millones de inciensos. 

Enfatizó que los preparativos son realizados desde abril, pero los productos sólo se venden en dos meses, normalmente diciembre y enero. 

La gomorresina seleccionada debe ser limpia, que proviene de las plantas cultivadas en áreas montañosas. La gomorresina luego se mezcla con un poco de carbón. Tras mucho trabajo meticuloso, se obtienen los inciensos. 

Este oficio centenario mejoró la vida de los lugareños. Antes casi todos los residentes locales participaban en la producción. Sin embargo, la rápida industrialización pone la tradición en riesgo de perderse. 

“Ahora sólo unos 50 de los 720 hogares en la aldea mantienen el oficio tradicional. Deseamos la ayuda del gobierno para ampliar el mercado. También planeamos solicitar el reconocimiento de este oficio como patrimonio cultural intangible.”, precisó Nguyen Duy Viet, jefe de la administración local. 

Cada año, el aroma de los inciensos negros de la aldea Choa despierta en los vietnamitas la nostalgia sobre los recuerdos del Tet tradicional. No obstante, son necesarias medidas concretas para salvar el oficio local de la amenaza de desaparición en el tiempo moderno.-VNA