Con lágrimas por los años transcurridos Le Sang, un anciano de 84 años oriundo de la ciudad central vietnamita de Da Nang, recibió el retrato de su madre Phan Thi Dien, que resguardó un veterano de guerra australiano.

La obra, pintada por su hermano Le Dinh Sung, es uno de los recuerdos de la guerra que el Centro Australiano de Estudios del Conflicto Armado y Sociedad entregó a los vietnamitas bajo la operación Wandering Souls (Almas Errantes) iniciado por excombatientes de Australia y Nueva Zelanda.

Con ese plan los participantes devuelven a familias vietnamitas objetos tales como cartas, diarios personales, dibujos, cuadernos y fotografías que se encontraron en el campo de batalla o en posesión de los fallecidos durante la agresión estadounidense.

"Hubiera sido reducido a cenizas si (G. W.) Dennis no lo hubiera conservado. En mi opinión, solo una persona con la conciencia tranquila y sensibilidad humana es capaz de guardar el retrato de una persona desconocida durante mucho tiempo”, expresó Sang.

Un día de 1968, el australiano llegó a un pueblo aislado en la provincia central de Quang Ngai y encontró la foto de una mujer en una casa en llamas. Aunque no podía leer la escritura en la parte posterior pensó que debió ser importante para esa familia, por lo que lo llevó de vuelta a Australia y lo mantuvo hasta que se enteró de Wandering Souls.

Además de la imagen, los veteranos australianos trajeron cartas, pinturas y bocetos recogidos en los campos de batalla en las provincias sureñas de Binh Dinh, Ba Ria-Vung Tau y Dong Nai. Todos los familiares de los soldados se conmovieron al recibir esos recuerdos.

Después de 45 años, Huynh Thi Sau, de 64 años de edad proveniente de la provincia de Binh Dinh, recuperó la carta enviada por su madre cuando Sau sirvió en el ejército popular como enfermera.

El líder del proyecto, Bob Hall, reiteró la aspiración de ayudar a los vietnamitas para reciprocar el respaldo del país indochino en la búsqueda, identificación y repatriación de los desaparecidos en combate.

El presidente del Comité Popular de Binh Dinh, Le Huu Loc, destacó que los recuerdos de la guerra son una lección para las generaciones jóvenes sobre el patriotismo y la gloriosa historia de la nación.

No llamamos a los soldados caídos almas errantes sino almas inmortales, porque viven en nuestra mente para siempre, añadió. –VNA