En el documento, recién publicado, se señala que las remesas mundiales del añopasado alcanzaron 682 mil 600 millones de dólares, lo que representa un aumentodel 7,6 por ciento. De ellas, el volumen enviado a Asia obtuvo un nuevo récordde 302 mil 100 millones de dólares, para una subida del 8,4 por ciento encomparación con 2017.
Este informe también indicó que la mejoría de las condiciones económicas y elmercado laboral en Estados Unidos, la recuperación de esos envíos de MedioOriente y la prosperidad de Rusia, han impulsado el flujo de remesas a estaregión, además de los precios más altos del petróleo y el fortalecimiento de lamoneda rusa.
A excepción de Asia Central, todas las subregiones de este continenteregistraron un crecimiento de esas fuentes de ingreso, observó.
El reporte precisa que, en particular, Asia del Sur recibió unos 132 milmillones de dólares, seguido por Asia Oriental con 79 mil millones de dólares.
La India, China y Filipinas son los mayores receptores de esos recursos, querepresentan el 59,5 por ciento del total en toda la zona y el 26,3 por ciento anivel mundial, agregó.
También enfatizó que esos ingresos son la fuente principal y estable de variospaíses en desarrollo de la región.
En promedio, la entrada de remesas a estas naciones fue 10 veces mayor que laAsistencia Oficial para el Desarrollo (AOD) desde 2012, contribuyendo de manerasignificativa a la producción nacional.
Por otro lado, este texto ofrece evaluaciones sobre la situación de lacooperación y la integración económica en Asia-Pacífico.
Asimismo, estudia las medidas para mejorar la productividad a través de laaplicación de la tecnología en esas naciones, cuya población está envejeciendo. .
Proporciona además una visión general de las cadenas comerciales y de valorglobal, de la inversión transfronteriza,de la integración financiera, de la migración y de la cooperaciónsubregional./.