Así lo anunció el teniente coronel Jo-Ar Herrera,portavoz del Batallón 1 de Infantería del Ejército, quien reveló que EstadosUnidos estaba proporcionando asistencia técnica para poner fin al asedio de laciudad de Marawi - ya en su tercera semana - por combatientes aliados con el autodenominadoEstado Islámico (EI), pero no tenía tropas sobre el terreno.
La Embajada de Estados Unidos confirmó que había ofrecidoapoyo, a petición del gobierno de Filipinas, pero no dio detalles.
Un avión de vigilancia estadounidense P3 Orion fue vistovolando por la ciudad el viernes, según medios de comunicación.
La cooperación entre los antiguos aliados essignificativa porque el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, que llegó alpoder hace un año, ha prometido expulsar a los asesores militaresestadounidenses de su país.
Con anterioridad, Estados Unidos entregó a Filipinascientos de ametralladoras, pistolas y lanzagranadas, que serán utilizadascontra los militantes islámicos que luchan contra las tropas gubernamentales enla ciudad de Marawi, en la isla de Mindanao, en el sur del país.
Las armas incluyen cuatro ametralladoras M134D, que soncapaces de disparar miles de balas por minuto, 300 fusiles de asalto M4 y 100lanzagranadas.
Los enfrentamientos entre las tropas gubernamentales ylos terroristas durante las últimas dos semanas han dejado al menos 178muertos.
En respuesta a la violencia, el presidente RodrigoDuterte rápidamente declaró la ley marcial en la región meridional de Mindanaopara neutralizar la creciente amenaza del EI.
Filipinas y Estados Unidos han sido durante décadasaliados cercanos, y están comprometidos por un tratado de defensa de 1951 aprotegerse mutuamente si son atacados.
El país norteamericano es el mayor proveedor de armas deFilipinas. –VNA