Estación de trenes de Da Lat, una joya arquitectónica de Indochina

La estación de tren de Da Lat, con números valores históricos y arquitectónicos, es un imprescindible destino para los excursionistas que viajan a la ciudad turística en la provincia de Lam Dong, en Tay Nguyen (Altiplanicie Occidental).

Estación de tren de Da Lat, en la provincia altiplana de Lam Dong. (Fuente: Vietnamplus)
Estación de tren de Da Lat, en la provincia altiplana de Lam Dong. (Fuente: Vietnamplus)

La estación de tren de Da Lat, con números valores históricos y arquitectónicos, es un imprescindible destino para los excursionistas que viajan a la ciudad turística en la provincia de Lam Dong, en Tay Nguyen (Altiplanicie Occidental).

Reconocida como la estación de tren más pintoresca de Vietnam, es la única de su tipo en la región de Tay Nguyen y en toda Indochina.

Cuenta con una estructura arquitectónica única inspirada en las montañas panorámicas circundantes y la casa tradicional "Rong", una variación de las casas sobre pilotes exclusiva de la región de la altiplanicie occidental.

Esta estación constituye una de las paradas en la línea ferrocarril de 84 kilómetros Phan Rang - Da Lat, una ruta construida por los franceses para conectar Tay Nguyen con la ciudad de Phan Rang en la provincia central de Ninh Thuan.

Toda la línea ferroviaria cuenta con 12 estaciones y cinco túneles, uno de los atractivos son sus 16 kilómetros de tren cremallera que asciende por pendientes pronunciadas.

Su construcción inició en 1908 por orden del gobernador general francés de la Indochina, Paul Doumer, y se completó en 1932, año que coincidió también con el inicio de la construcción de la estación de tren de Da Lat.

Los arquitectos galos Moncet y Revéron fueron los encargados de su diseño y la obra culminó en 1938, erigiéndose desde ese entonces como una de las estaciones más vistosas de Vietnam y de toda Indochina.

Además, con la arquitectura del edificio lograron un hito urbano único pero que se mantiene en sincronía con la naturaleza del lugar.

Su fachada presenta una disposición simétrica, con el bloque arquitectónico central simulando los tres picos de la montaña Langbiang y los tejados de las casas largas tradicionales de Tay Nguyen.

Asimismo, en el centro del edificio hay un gran reloj que conmemora el momento en que el médico Alexandre Yersin descubrió Da Lat, sin dudas una mezcla igualable de arte e historia.

En la parte delante están ubicadas dos salas, una para pasajeros y otra para carga, y entre esas dos áreas es donde se esperan los trenes.

Por todos esos rasgos arquitectónicos e históricos, la estación fue reconocida como sitio histórico-cultural nacional en 2001.

Con el fin de mantener el valor de la estación, en agosto de 2023, el Comité Popular de la provincia de Lam Dong emitió un plan dirigido al desarrollo del transporte ferroviario hasta 2030, con una visión para 2045.

El proyecto se centra en restaurar, mejorar y utilizar eficazmente el singular tren de cremallera Da Lat-Thap Cham para el turismo.

Para el 21 de junio de 2024, el Comité Popular provincial emitió una resolución reconociendo oficialmente la estación de tren de Da Lat como un destino turístico gestionado por la Corporación de Ferrocarriles de Vietnam.

Recientemente, durante la tercera Semana Dorada del Turismo de Lam Dong 2024, se lanzó un nuevo recorrido nocturno, que ofrece una nueva experiencia para que los viajeros tengan una mejor idea de la encantadora belleza de Da Lat en cualquier horario.

En esa ruta de casi siete kilómetros, los turistas pueden viajar en vagones con diseños tanto clásicos como modernos y disfrutar del paisaje nocturno y de servicios novedosos como un bufé y música en vivo.

Algo que aumenta el atractivo de esta ruta es el acceso Wi-Fi e incluso servicios de bodas para los interesados.

Los trenes están programados para salir de Da Lat a las 6:15 pm y 8:20 pm y de Trai Mat a las 7:15 pm y 9:20 pm, las tarifas varían de 2,9 dólares a cuatro dorales por trayecto.

Da Lat, es conocida como la ciudad de la Eterna Primavera por estar rodeada de colinas, bosques de pinos, lagos y cascadas y un clima templado, si a ello le suma joyas arquitectónicas como su estación de tren, resulta entonces un destino imperdible.

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