En su artículo publicado en el sitio web del Instituto, dijo que las tendenciasmundiales del comercio, la inversión extranjera y la producción ofrecen unacombinación de desafíos y oportunidades para los gobiernos de esos paísesmientras intentan encauzar sus economías dañadas hacia la recuperación.
“Asaltados por bloqueos, cadenas de suministro interrumpidas y restricciones deviaje, los volúmenes del comercio mundial cayeron a niveles históricamentebajos en la primera mitad de 2020. El Sudeste Asiático no fue una excepción:las economías de la región dependen en gran medida de la demanda”, continuó.
En el segundo trimestre de 2020, el valor de las exportaciones de los 10 miembrosde la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) cayó un 15 por cientointeranual.
Los flujos de inversión extranjera directa hacia la región también disminuyerondrásticamente a principios de 2020, precisa el texto.
La fuerte caída en el comercio mundial de bienes, al menos, puede estar tocandofondo, pero el Fondo Monetario Internacional (FMI) todavía mantiene un panoramasombrío sobre las perspectivas de una recuperación impulsada por el comercio enAsia.
En medio de toda la incertidumbre y el riesgo a la baja, el Sudeste Asiáticopuede encontrarse en una mejor posición que otras regiones para salir de los problemascomerciales, dijo el experto, citando que el regionalismo económico sefortalecerá como una de las razones.
La mayoría de las principales economías de Asia Oriental (China y su territorio Taiwán, Japón y Coreadel Sur) han logrado reabrir sus economías.
Mientras, el consumo interno en la región podría duplicarse a cuatro billonesde dólares en los próximos diez años.
Vietnam, una de las economías de la ASEAN con mejor desempeño, logró uncrecimiento económico en 2020, citó.
Una vez que entre en vigor, el Acuerdo de Asociación Económica IntegralRegional (RCEP) dará otro impulso al comercio intrarregional.
“La ASEAN también se beneficiará de la diversificación de las cadenas desuministro”, indicó.
Japón, por ejemplo, ha ofrecido incentivos financieros a algunas de susempresas para construir fábricas de producción en el Sudeste Asiático./.