Ninh Binh, Vietnam (VNA) – La aldea Non Khe, en la provincia vietnamita de Ninh Binh, acoge cada año el Festival Bao Ban, una tradición ancestral dedicada a rendir homenaje a los antepasados y fundadores de los pueblos.
Celebrado el día 14 del primer mes lunar este evento llama la atención de los visitantes nacionales e internacionales por su gran escala, ritos ceremoniales y singulares hábitos.
La festividad inicia con una solemne ofrenda de incienso y ceremonias en homenaje a los fundadores de las aldeas y a los héroes caídos que sacrificaron sus vidas en etapas de guerra.
El evento es una oportunidad para que los aldeanos se reúnan y compartan sus logros con los ancestros y las deidades protectoras del pueblo, así como para celebrar los éxitos académicos y profesionales de los más jóvenes y rememorar los logros de las generaciones precedentes.
Durante la festividad el ambiente se llena de emoción con un gran número de juegos tradicionales como intensas competiciones de ajedrez hasta emocionantes danzas del león y combates de lucha libre.
Asimismo, se realizan espectáculos culturales de canto folclórico, lo que enriquece aún más experiencia para todos los asistentes.
Uno de los aspectos más destacados de la celebración es el dinámico mercado nocturno que se prepara las noches del 12 y 13 del primer mes lunar.
Miles de visitantes acuden a este espacio para degustar delicias rústicas y locales que deleitan el paladar, como el Banh Duc (pastel de arroz al vapor), el Banh Gai (pastel de hojas espinosas), el Banh Cuon (rollitos de arroz al vapor), el Bun Rieu (sopa de fideos con cangrejo) y el Bun Oc (sopa de fideos con caracol).
Al concluir la festividad los residentes de Non Khe tienen mucho más entusiasmo para afrontar la nueva temporada de trabajo, y lo hacen con la esperanza de una mayor prosperidad y bienestar que el año anterior.
Con cerca de 600 años de historia, el festival evoca una época crucial a finales de la dinastía Le, cuando los soldados defendieron y expandieron las fronteras del sur del Estado de Dai Viet. Más allá de su importancia histórica, encarna las creencias espirituales del pueblo vietnamita en la parte baja del delta del Río Rojo.
Esta celebración mantiene la solemnidad y reverencia propia de su surgimiento, conservado relativamente intactos antiguos rituales asociados con el culto a los fundadores de la aldea, héroes nacionales de la dinastía Le y deidades del agua.
También se preservan meticulosamente el folclore, la arquitectura popular, las escrituras ceremoniales en caracteres Nom y las técnicas culinarias tradicionales para preparar arroz glutinoso, pasteles, pollo hervido y ofrendas de cerdo.Sin embargo, a lo largo de los años el evento se ha vuelto más vibrante y cálido, encarnando el espíritu de desarrollo de la comunidad y cautivando la atención de los visitantes.
De igual forma, sirve como un depósito cultural, preservando diversos valores y elementos tradicionales que conforman la identidad única de la aldea.
Teniendo en cuenta su importancia cultural e histórica, el Ministerio de Cultura, Deportes y Turismo de Vietnam emitió el 10 de diciembre de 2024 una decisión declarando oficialmente el festival Bao Ban como Patrimonio Cultural Inmaterial.
Con el objetivo de preservar y promover este valioso patrimonio, la provincia de Ninh Binh trabaja para mejorar el papel de las autoridades locales en la dirección, gestión y guía de las actividades del festival.
También se realizarán esfuerzos para sensibilizar al público, realizar investigaciones, recopilar materiales, restaurar y documentar las diferentes actividades del festival.
De igual forma, la ciudad prevé organizar representaciones del arte teatral Cheo y espectáculos musicales para enriquecer la experiencia del festival. Esto impulsará aún más el papel de la comunidad, promoverá el valor cultural y elevará la participación social en la conservación de este patrimonio./.