Tokio (VNA) – El alcalde de la ciudad japonesa de Hiroshima, Kazumi Matsui, expresó su profunda impresión ante la activa participación de Vietnam en el movimiento “Alcaldes por la Paz”, una red global que promueve la eliminación de armas nucleares y la construcción de un mundo pacífico.
Hasta el 1 de julio de 2025, el movimiento ha reunido a 8.497 ciudades de 166 países y territorios, entre ellas siete urbes vietnamitas, incluida Hanoi, Ciudad Ho Chi Minh, Hai Phong, Da Nang, y Hue.
Según Kazumi Matsui, Vietnam es uno de los países con mayor número de ciudades integrantes, lo cual refleja su firme compromiso con la paz.
Recordó que la nación indochina ha sufrido las secuelas de la guerra, incluidos los efectos devastadores del agente naranja, al igual que Hiroshima padeció los estragos de la bomba atómica.
A su juicio, el espíritu de Hiroshima, el anhelo de superación y paz, ha llegado hasta Vietnam.
El alcalde también manifestó su deseo de fortalecer la cooperación con localidades vietnamitas a través de intercambios culturales e iniciativas comunitarias, con el fin de difundir el mensaje de paz a todos los estratos sociales.

Por su parte, el alcalde de Nagasaki, Shiro Suzuki, destacó el papel relevante de Vietnam en los foros internacionales sobre el desarme nuclear, incluida la Conferencia de los Estados Partes del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares.
Suzuki aseguró que el Gobierno vietnamita ha participado de forma activa y responsable en los debates globales, y expresó su profundo respeto por dichos esfuerzos.
Consideró que las localidades vietnamitas y las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, ambas víctimas de ataques nucleares, pueden colaborar de diversas maneras para impulsar las iniciativas por la paz.
Además, indicó los vínculos históricos entre Nagasaki y Vietnam, los cuales datan del siglo XVII con el matrimonio de la princesa Ngoc Hoa (conocida por los japoneses como la princesa Anio), hija del señor Nguyen Phuc Nguyen, y el comerciante japonés Araki Sotaro.
Esta historia de amor transcultural se ha convertido en parte del patrimonio cultural de Nagasaki y se representa cada año en un festival tradicional celebrado en octubre.
Sobre esta base histórica, el alcalde subrayó su confianza en que las relaciones entre Nagasaki y Vietnam seguirán desarrollándose y aportando a los esfuerzos comunes por un mundo sin guerras ni armas nucleares.
En el contexto actual de que las amenazas nucleares aún persisten, los movimientos por la paz adquieren mayor urgencia. Hiroshima y Nagasaki, dos ciudades que sufrieron los horrores de las bombas atómicas en 1945, se han convertido en símbolos globales del deseo de paz y una advertencia contra la guerra nuclear.
El reconocimiento de los dirigentes de estas urbes hacia Vietnam no solo evidencia las contribuciones activas del país en la arena internacional, sino que también constituye un llamado a la responsabilidad compartida de la humanidad en la construcción de un futuro sin armas nucleares./.