Según un informe del Departamento de Educación y Formación de Ciudad Ho ChiMinh, en el inicio del nuevo año escolar la urbe sureña cuenta con más de mil500 alumnos de secundaria que quedaron huérfanos por la muerte de sus seresqueridos debido al COVID-19 en los últimos meses.
Esa cifra puede resultar mayor si se incluyen los niños en edad preescolar yalgunos casos especiales fuera del sistema educativo.
El director del Departamento de la Infancia del Ministerio de Trabajo,Inválidos y Asuntos Sociales, Dang Hoa Nam, patentizó la necesidad de cuidar lasalud física y mental para reducir el trauma psicológico de esos niños, debidoa que los impactos de la pandemia de COVID-19 son diferentes a los de otrascrisis sociales y los desastres naturales.
La misma entidad urgió a las localidades a actualizar las informacionesrelacionadas a los niños, sobre todos los huérfanos, con el fin de ayudarles deforma rápida y oportuna, y para que ningún menor se quede atrás.
Además de las políticas del Estado y los gobiernos locales, organizaciones eindividuos han implementado programas asistenciales prácticos para ayudar a losniños a superar sus dificultades provocadas por la epidemia.
Por otro lado, el Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Socialespidió a las provincias y ciudades actualizar la lista de niños concircunstancias difíciles para tomar las medidas asistenciales adecuadas en cadacaso.
Por su parte, la representante en jefa del Fondo de las Naciones Unidas para laInfancia (UNICEF) en Vietnam, Rana Flowers, afirmó el apoyo de su organización alos programas asistenciales mencionados, calificándolos como una labor oportunay necesaria en el contexto epidémico actual.
Mientras tanto, el jefe de la Comisión de Cultura y Educación del Parlamento,Nguyen Dac Vinh, propuso aplicar políticas asistenciales a largo plazo paraayudar a esos niños desafortunados a superar sus circunstanciasdifíciles./.