Al intervenir enla sesión efectuada la víspera aquí, la embajadora Pham Thi Kim Anh, encargadade negocios de la misión de Hanoi ante la mayor organización internacional, reiteróla profunda preocupación de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático(ASEAN) ante las crecientes violaciones de los derechos infantiles.
Los ataquesdirigidos a escuelas, docentes y estudiantes obstaculizan su accesoal estudio, así como la oportunidad de obtener un mejor futuro, recalcó KimAnh, y en ese sentido, llamó a la comunidad internacional a actuar con consensoy con más firmeza para alcanzar cambios radicales.
Reiteró laposición de la ASEAN sobre la necesidad de disponer de estrategias para la protección de lospequeños tanto en sus países, como a nivel regional y global, que comprendan desde la eliminacióndel uso de niños combatientes, la reincorporación social delos menores afectados, hasta la sanción a los culpables de las violaciones.
El bloquesudesteasiático también aboga por introducir el cuidado infantil en losprocesos de paz, para cubrir las demandas de ese grupo poblacional durante y despuésde los conflictos armados, garantizar el acceso a la educación y la atención de salud, y otrosservicios básicos, afirmó.
Kim Anh tambiénllamó a fortalecer el diálogo constructivo entre las partes involucradas, losgrupos armados no estatales, los organismos de la ONU yorganizaciones comunitarias.
Tras asegurar quela protección de los menores constituye una prioridad de la ASEAN, ladiplomática ratificó el compromiso de la agrupación de coordinar con los sociosla garantía de un mejor futuro para todos los niños.
Un informe dado aconocer durante el debate señala que más de 10 mil infantes víctimas del reclutamientomilitar fueron liberados de los grupos y fuerzas armadas, mientras 12 mil recibieron asistencia para reincorporarse a la sociedad y tener una vida normal.
Sin embargo, elnúmero de violaciones de los derechos infantiles en los conflictos armados crecióun 35 por ciento, de 15 mil casos en 2016 a 21 mil en 2017.
Los participantesmanifestaron su preocupación sobre el incremento de lastransgresiones, especialmente asesinatos, lesiones, secuestros, abusossexuales, reclutamientos coercitivos para servicios militares, e incluso el usode los niños como "bombas humanas".
Exhortaron a laspartes involucradas a respetar las leyes internacionales y los derechos humanos,solucionar de raíz los enfrentamientos, adoptar medidas preventivas y respaldarla reincorporación social de estas pequeñas víctimas de la guerra. – VNA