En el informe “Género y el mercado laboral en Vietnam: Análisis basado enencuesta de población activa” de la mencionada entidad, los especialistasafirmaron que el COVID-19 no solo exacerbó las desigualdades existentes en elmercado laboral, sino que creó otras nuevas.
Por tal motivo, sugirieron que para superar esa dificultad, Vietnam debeenfocarse en cambiar la mentalidad y las percepciones sobre la igualdad degénero no solo en los hombres, sino también en las mujeres.
El estudio también señaló que con una alta tasa de participación en el mercadolaboral, las mujeres vietnamitas enfrentan muchas desigualdades persistentes,al encargarse de las responsabilidades laborales y familiares mucho más grandesque los hombres.
La distribución desigual de las responsabilidades familiares en la sociedadvietnamita puede ser la causa de esa disparidad, dijo Valentina Barcucci,experta en economía laboral de la OIT en Vietnam y autora principal delinforme, al enfatizar que antes de la epidemia, las féminas ocupan la mayoríade los empleos vulnerables, especialmente las tareas del hogar, pero sus ingresoseran aproximadamente un 18 por ciento más bajos que los de los hombres en 2019.
Además, la proporción de mujeres en la toma de decisiones todavía es baja, alocupar menos de una cuarta parte de los puestos de liderazgo y direccióngeneral.
La desigualdad para las mujeres en términos de calidad laboral y desarrolloprofesional también se deriva de la doble responsabilidad que deben asumir, yaque dedican el doble de tiempo que los hombres a las tareas domésticas, indicóBarcucci.
Las investigaciones también muestran que las mujeres dedican un promedio de20,2 horas a la semana a las tareas domésticas y al cuidado de la familia,mientras que los hombres solo destinan 10,7 horas a esos trabajos. Casi unaquinta parte de los varones ni siquiera prestan atención a las labores delhogar./.