En el sector económico, se proyecta para los próximos cinco y diez años,respectivamente, aumentar el porcentaje de mujeres asalariadas al 50 y 60 porciento; reducir la proporción de trabajadoras en la agricultura sobre el totalde las que tienen empleo al 30 y 25 por ciento; así como incrementar la tasa deféminas dueñas de empresas y cooperativas al menos al 27 y 30 por ciento.
Para 2025 y 2030, correspondientemente, el promedio de horas de trabajodoméstico y de cuidado no remunerados de las mujeres disminuirá a 1,7 y 1,4veces en comparación con los hombres; y la cantidad de víctimas de la violenciadoméstica y de género con acceso a como mínimo un servicio de asistencia básicase elevará al 80 y 90 por ciento.
En cuanto a la salud, se espera que la proporción de sexos al nacer se mantengaen 111 niños por cada 100 niñas en 2025 y en 109 niños por cada 100 niñaspara 2030, y la tasa de mortalidad materna se reduzca a 42 por cada 100 milnacidos vivos y por debajo de esa cifra para esos años respectivos.
En el campo de la educación, se incluirán los contenidos de género e igualdad entrehombre y mujeres en el plan de estudios del sistema educativo nacional paraimpartirlos en las escuelas pedagógicas a partir de 2025.
Además, según el programa, la tasa de niños y niñas de minorías étnicas quecompletan la educación primaria alcanzará más del 90 por ciento para el próximoquinquenio y alrededor del 99 por ciento para la década venidera; mientras queese indicador para el nivel de secundaria se mantenga en aproximadamente el 85 yel 90 por ciento para los periodos correspondientes./.