Elportavoz del Ministerio de Trabajo y Formación Profesional del país sudesteasiático,Heng Sour, subrayó que las ventas al exterior de esos rubros en el primertrimestre de 2020 sufrió una caída interanual de 80 por ciento, con elestadillo en febrero pasado del brote del COVID-19 en la Unión Europea yEstados Unidos, dos mayores mercados de los mencionados productos camboyanos.
Segúnlas autoridades, en la segunda mitad de abril, otras 10 fábricas de vestuarios enCamboya se vieron obligadas a detener su operación, lo que afectó a más de seismil trabajadores.
Duranteel tiempo de la suspensión de jornadas laborales, a los trabajadores se lespagan cada mes 70 dólares, de ese monto, 40 dólares provienen del Gobierno y elrestante, de los empleadores.
SegúnHeng Sour, hasta el momento, un total de 130 fábricas de ropa en Camboya suspendieronsus operaciones debido a la fuerte disminución de los pedidos, situación queafecta a 100 mil empleados.
Segúndatos del Ministerio de Industria, Ciencia, Tecnología e Innovación de lanación indochina, se registran en el país mil 99 fábricas dedicadas a laindustria de textiles./.