Ciudad Ho Chi Minh, 14 feb (VNA)- Tras un accidente a los 21 años de edad, Ta Anh Dung pareció aceptar la fatalidad de haber perdido una pierna. Sin embargo, con su tremenda voluntad y la serenidad de espíritu de un amante de las artes marciales, Dung siguió su sueño y finalmente logró convertirse en un maestro de esa disciplina, dando celebridad a la escuela Kim Ke Tay Son Nhan.
Ta Anh Dung nació en una familia con tradición en las artes marciales en Ciudad Ho Chi Minh. Su padre, Ta Anh Dang, apodado Anh Sang, era un luchador que a menudo competía en las arenas de combate en el período de dominación francesa en Vietnam.
Cuando tenía cuatro años de edad, Ta Anh Dung aprendió de su padre los movimientos simples y las actuaciones básicas de las artes marciales tradicionales.
En su escuela primaria, Dung asistió a una clase de entrenamiento de taekwondo. Luego, como quería conocer otras escuelas marciales para conocer sus fortalezas y debilidades, y las formas de superarlas, empezó a practicar aikido de Japón y shaolin de China.
En la plenitud de la juventud, sufrió un accidente y perdió una pierna, lo que extinguió la llama de su afición por las artes marciales.
Recordando ese momento, Dung dijo: "Todos mis sueños y aspiraciones parecían irse. Con una sola pierna, me enfrenté a tremendas dificultades para moverme y en las actividades diarias, y mucho menos podía practicar artes marciales".
Sin embargo, con un ardiente amor por las artes marciales, con el apoyo de su familia, Dung fue recuperando poco a poco el optimismo con la mejoría de su salud y persistió en la práctica de las artes marciales en una forma creativa, adecuada a su discapacidad.
Para mantener el equilibrio sobre una pierna, practicaba la posición durante muchas horas, subía las escaleras con una muleta y llevaba pesas mientras trabajaba. También solía jugar al ping pong y nadar, para mejorar su capacidad de reacción y fortalecer sus brazos.
Después de muchos años de duro entrenamiento, fue capaz de dominar su cuerpo y se incorporó a la escuela de artes marciales de Kim Ke Tay Son Nhan, dirigida por el maestro Dang Van Anh.
Con una sola pierna, no puede practicar patadas técnicas por lo que se centró en la formación de todo su cuerpo como un arma natural para golpear, luchar y atacar, empleando técnicas que son ejecutadas por las manos, los codos y las rodillas.
También encontró formas de convertir sus inconvenientes en ventajas con un estilo adecuado para atacar. Dung creó sus propias técnicas con muletas, palos de dos o tres piezas que se utilizan para ataque y defensa e incluso enseñar a otras personas con discapacidad como él.
Después de 30 años practicando artes marciales, Ta Anh Dung ahora es conocido como el maestro de "una pierna", respetado y admirado en el círculo de las artes marciales. También es capaz en el boxeo, muay thai y pencak silat.
"Mientras más difícil es la vida, más esfuerzo debemos hacer para superarnos y seguir nuestra pasión", expresó.
Todos los días comienza su trabajo distribuyendo periódicos en los distritos 5 y 6, desde las cinco de la mañana. Todas las noches enseña artes marciales en dos escuelas secundarias, Ly Phong y Hiep An. Muchos de sus alumnos son ahora miembros de los equipos juveniles de la ciudad que han ganado premios en concursos locales y regionales.-VNA