Hanoi (VNA) - El tifón Kajiki provocó la alteración de 65 vuelos hasta las 16:00 horas del 25 de agosto, según un informe del Comité de Defensa Civil del Ministerio de Construcción.
En total, 30 vuelos tuvieron que modificar sus rutas, mientras que otros 35 fueron cancelados debido a la suspensión temporal de operaciones en varios aeropuertos.
En las zonas directamente afectadas, el Aeropuerto de Dong Hoi (provincia de Quang Tri) retomó sus actividades tras haber interrumpido la recepción de aeronaves desde las 4:00 hasta las 16:00 del mismo día. Hasta el momento, no se han registrado daños a personas ni a las instalaciones.
El Aeropuerto de Tho Xuan (provincia de Thanh Hoa) también adoptó medidas para reforzar sus infraestructuras y suspendió la recepción de vuelos entre las 10:00 y las 21:00 horas. Las aerolíneas están ajustando sus itinerarios en coordinación con el aeropuerto, y no se han reportado daños materiales.
Por su parte, el Aeropuerto de Vinh (provincia de Nghe An), que permanece cerrado desde el 1 de julio por trabajos de renovación, reportó una inundación de aproximadamente 10 centímetros en parte de su plataforma de estacionamiento, además del colapso parcial del vallado en la zona de obras.
En el Aeropuerto Internacional de Phu Bai (ciudad de Hue), un avión con número de vuelo VNB593, perteneciente a la empresa Hành Tinh Xanh, permanece estacionado y ha sido asegurado conforme a la normativa vigente. Tampoco se han registrado daños personales ni materiales en este recinto.
La Autoridad de Aviación Civil de Vietnam identificó como zonas bajo impacto directo de la tormenta a los aeropuertos de Tho Xuan, Vinh, Dong Hoi y Phu Bai.
Por su parte, la Corporación de Gestión del Tráfico Aéreo de Vietnam ha movilizado todos los recursos disponibles, tanto humanos como técnicos, para garantizar la precisión de los pronósticos meteorológicos aeronáuticos y asegurar la operatividad del control del tráfico aéreo frente a la situación climática adversa.
Asimismo, los aeropuertos están implementando diversas medidas para proteger la infraestructura y las aeronaves en tierra, con especial atención a los sistemas de drenaje, a fin de prevenir inundaciones causadas por las fuertes lluvias antes y después del paso de la tormenta.
Las aerolíneas, por su parte, están ajustando sus planes de vuelo y notificando puntualmente a los pasajeros, permitiéndoles reorganizar sus desplazamientos de manera oportuna./.