En sintonía con otras localidades en todo el Vietnam, varias entidades de la provincia central de Khanh Hoa organizaron hoy actividades para honrar la salvaguardia de la soberanía marítima e insular nacional.

Unos 300 jóvenes locales participaron en un seminario sobre las políticas y orientaciones del Partido Comunista y el Estado relacionadas con la solución pacífica de las disputas territoriales en el Mar Oriental.

Los delegados también se informaron de la instalación ilícita por China de la perforadora petrolera Haiyang Shiyou-981 en la zona exclusiva económica y la plataforma continental de Vietnam.

Esa acción viola gravemente los derechos soberanos y jurisdiccionales, así como la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) de 1982, al igual que genera las tensiones en el Mar Oriental y amenaza la paz y estabilidad en la región, acordaron los participantes.

Ante el suceso, Vietnam toma de manera consecuente todas las medidas para resolver las disputas por vías pacificas y sin violencia, insiste en la defensa nacional y emplea todos los canales de todos los niveles para exigir la retirada inmediata por Beijing de la perforación petrolífera y sus barcos acompañantes, reiteraron en la cita.

Mientras tanto, empresas locales recaudaron fondos destinados a apoyar a las unidades que montan día y noche la firme guardia en las islas y el mar de la Patria.

De misma manera, más de 500 dueños de pesqueros que operan alrededor de los archipiélagos vietnamitas de Hoang Sa (Paracels) y Truong Sa (Spratlys) se beneficiaron de cursos para mejorar sus habilidades en el trabajo.

La verdad histórica es que China inició su conquista ilegal de la parte occidental del archipiélago vietnamita de Hoang Sa en 1956 y en 1974, invadió con fuerza a las islas orientales de ese territorio.

Con la misma política violenta, Beijing lanzó en el 14 de marzo de 1988 un ataque militar y ocupó varias islas del archipiélago vietnamita de Truong Sa.

China estableció arbitrariamente una línea de base ambigua (conocida como de “nueve tramos”, en “forma de U” o en “forma de lengua”) que comprende el 80 por ciento de la superficie del Mar Oriental, lo cual va totalmente en contra de la Convención de la ONU sobre el Derecho en el Mar (UNCLOS) de 1982 y viola la soberanía marítima de países vecinos.

Como parte de esa estrategia ambiciosa e infundada, Beijing busca crear “zonas de disputa” imaginarias en aguas totalmente jurisdiccionales de otras naciones, para imponer luego su política superficialmente pacífica de “ceder en los litigios para explotar juntos”.

Vietnam dispone de suficientes evidencias históricas y bases jurídicas para declarar su soberanía sobre esos dos archipiélagos en el Mar Oriental, y los reinos feudales del país indochino ejercieron, por lo menos, desde el siglo XVII su jurisdicción en ambos territorios de forma constante y pacífica. –VNA