Otra actividad de Beijing quetropieza con la rechaza de la comunidad internacional es la movilizacióncontinuada a barcos al Bai Ba Dau (Arrecife de Whitsun), que pertenece alarchipiélago Truong Sa (Spratly) de Vietnam.
Filipinas presentó otras dos notasde protesta al respecto, argumentando que las acciones del país de Asia Orientalen el Mar del Este han provocado un entorno inestable y dañan el proceso deimpulsar la paz y la estabilidad en la región.
En una resolución emitida el 26 deabril pasado, los senadores filipinos criticaron a Beijing por sus acciones queprovocan la tensión en el Mar del Este y señalaron que las mismas significanuna clara violación de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derechodel Mar (UNCLOS) de 1982 y el fallo del tribunal de La Haya de 2016 quedescartó la demanda expansiva de China sobre esas aguas.
Exigieron a China respetar laUNCLOS de 1982 y aseveraron que la misma constituye una Constitución para losocéanos y es un tratado internacional que codifica el derecho internacionalconsuetudinario, que no considera la exhibición de poderío militar o fuerzacomo un medio válido para apropiarse o reclamar áreas y recursos marítimos.
En tanto, en el Libro Azul Diplomático2021 publicado el 27 de abril, el Gobierno de Japón expresó su preocupación porla ampliación de las actividades militares de Beijing y la intensificación desus acciones en el Mar de China Oriental y el Mar del Este.
Ese documento subraya que laexpansión de China de las capacidades militares que carecen de transparencia ylas crecientes acciones unilaterales para cambiar el statu quo en esas aguasasiáticas plantean “fuertes preocupaciones” en la región y para la comunidadinternacional.
Con anterioridad, el primerministro nipón, Yoshihide Suga, y el presidente estadounidense, Joe Biden,advirtieron sobre las recientes actividades provocativas chinas en la región.
"Nos oponemos a cualquierintento de cambiar el statu quo por la fuerza o la coerción", reafirmó eljefe del Gobierno japonés en una reunión con Joe Biden a mediados de abrilpasado en Washington.
A su vez, la Unión Europea (UE)también manifestó su preocupación por la presencia de los buques chinos envarias zonas en el Mar del Este y en una declaración dirigida al ServicioEuropeo de Acción Exterior, el bloque comunitario enfatizó que la presencia delos barcos de Beijing en el Arrecife de Whitsun pone en peligro la paz y laestabilidad en la región.
Reiteró el apoyo al el procesoliderado por la ASEAN hacia un Código de Conducta efectivo, sustantivo yjurídicamente vinculante, que no debe perjudicar los intereses de terceros, y exigió,además, a todas las partes realizar esfuerzos hacia su finalización.
Por otro lado, instó a cumplirplenamente el derecho internacional, en particular la UNCLOS, en interés detodos.
En tanto, en el Diálogo Raisina enla India el 13 de abril, el secretario general de la Organización del Tratadodel Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, subrayó que las medidas más asertivas deBeijing desafían el orden internacional basado en reglas y obstaculizan lalibertad de navegación en el Mar de China Meridional.
Mientas, el exjuez de la corte supremade Filipinas Antonio Carpio advirtió que el incremento de las reclamaciones deChina en el Mar del Este amenaza la UNCLOS de 1982.
La página web eurasiareview.com publicóun artículo refiriendo a las actividades ilegales de los barcos chinos en el Arrecifede Whitsun de Truong Sa de Vietnam y subrayó que las crecientes incursiones delgigante asiático en esas aguas, desafiando las normas mundiales, han aumentadolas tensiones en la región.
Las actividades chinas van encontra del espíritu y contenido de la Declaración sobre la Conducta de las Partesen el Mar del Este (DOC).
En una rueda de prensa ordinaria dela Cancillería efectuada el 29 de abril pasado, el portavoz adjunto delMinisterio de Relaciones Exteriores de Vietnam, Doan Khac Viet, subrayó que supaís rechazó enérgicamente la decisión de China de prohibir la pesca en el Mardel Este y pidió a todas las partes cumplir las leyes internacionales, incluidala Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) de 1982.
Khac Viet reiteró que Vietnam tiene suficiente bases legales y evidenciashistóricas que reafirman su soberanía sobre los archipiélagos de Truong Sa(Spratly) y Hoang Sa (Paracel), así como sus derechos legales sobre las áreasmarítimas determinadas como territorios soberanos de Vietnam de acuerdo con laUNCLOS.
Vietnam considera que las medidas para conservar los recursosbiológicos deben llevarse a cabo según las disposiciones de la UNCLOS, sinperjudicar los derechos soberanos y jurisdiccionales en el mar de los paísesrelacionados, recalcó.
“Protestamos y rechazamos esta decisión unilateral de Chinaque viola la soberanía de Vietnam sobre el archipiélago de Hoang Sa, y va encontra de las leyes internacionales, incluida la UNCLOS de 1982, la Declaración sobre la Conducta delas Partes Concernientes en el Mar del Este y el acuerdo sellado por Vietnam y Chinaacerca de los principios básicos para dirigir la solución de los problemas enel mar entre los dos países”, enfatizó.
Nuevamente declaró que cualquier acto que perjudique lasoberanía de Vietnam sobre los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa, así comola soberanía, los derechos soberanos y jurisdiccionales del país sobre susáreas marítimas es inválido y no está reconocido, y Vietnam se oponeresueltamente a tales acciones./.