Manila (VNA) - La Autoridad Nacional de Desarrollo y Economía de Filipinas (NEDA) confirmó que la pandemia de COVID-19 podría causar hasta 730 mil millones de dólares en daños para la economía filipina dentro de 10 a 40 años próximos.
Según Karl Kendrick Chua, ministro de Planificación socioeconómica, la pérdida económica de este país en 2020 fue de 84 mil 800 millones de dólares. Se prevé que el consumo y la inversión disminuirán en los próximos 10 años, debido a la reducción de la demanda en sectores que requieren distanciamiento social, como el turismo, la restauración y el transporte público. Además, los ingresos fiscales serán menores si las empresas no pueden operar al 100 por ciento de su capacidad.
El alto funcionario evaluó que la pérdida del sector de inversión privada y las ganancias podrían alcanzar los 420 mil 270 millones de dólares. Kendrick Chua expresó que en 2029, la economía regrese completamente al mismo nivel de crecimiento antes de COVID-19, o sea 10 años después del estallido de la pandemia.
Por otro lado, los funcionarios filipinos esperan que la economía nacional comience a registrar crecimiento a fines de 2022 o principios de 2023.
Según el ministro Kendrick Chua, el impacto de la pandemia de COVID-19 en la productividad laboral duraría hasta los próximos 40 años. Citando la investigación de NEDA, dijo que durante las cuatro décadas próximas, las pérdidas de productividad en la inversión de el capital humano y las ganancias totalizarían 305 mil 830 millones de dólares.
Desde marzo de 2020, Filipinas ha aplicado medidas de prevención de COVID-19 en diversos grados. A pesar del período de bloqueo más estricto y prolongado, este país del sudeste asiático aún tiene que luchar con el creciente número de pacientes contagiados.
Actualmente, Filipinas registró un total de dos millones 470 mil 235 casos positivos, de los cuales 37 mil 405 son fatales./.