La erosión del terreno es cada vez severa en el delta del Mekong y afecta la vida de miles de sus pobladores.

En An Giang, una de las provincias más inundadas de la zona y más dañadas por la erosión, se registran alrededor de 50 puntos candentes, con una longitud total de 150 kilómetros a lo largo de los ríos Tien y Hau, dos afluentes del Mekong.

Más de seis mil familias en An Giang ahora viven en zonas vulnerables y esperan reubicación a lugares más seguros. Las autoridades locales adoptaron varias medidas para evitar degradación.

Las inundaciones de este año causadas por el aumento del nivel del Mekong se espera que lleguen al nivel de tercera advertencia, según el Centro Nacional de Pronóstico Hidrometeorológico. Sin embargo, la erosión continúa agravándose.

La extracción ilegal de arena y la construcción de casas a lo largo de los ríos contribuyen al deterioro, según los expertos.

En la provincia de Dong Thap, vecina de An Giang, ese fenómeno causa la pérdida de más de 26 mil metros cuadrados de terreno y afecta a cerca de seis mil familias, que necesitan ser reubicadas.

También perjudica a los pobladores en las zonas costeras de Tra Vinh, Kieng Giang y Ca Mau.

En los territorios dañados de Ca Mau, se utilizan estacas de madera y sacos de arena para evitar la erosión, además de la construcción de muros de contención, a un costo de más de cinco millones de dólares.

En Tra Vinh, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural aprobó la construcción de diques, con un fondo de 25 millones de dólares. Sin embargo, las autoridades dijeron que para proteger a los residentes, la localidad necesita más de 71 millones de dólares para la edificación de un sistema de muro costero.

La destrucción de los bosques de protección en las costas es la razón principal de la erosión de los diques, de acuerdo con especialistas, quienes abogan por recuperar y desarrollar esas plantaciones.-VNA