Hanoi (VNA) - La industria de apoyo se ha consolidado como la columna vertebral de la industria moderna en Vietnam, gracias a su papel esencial en el suministro de componentes, piezas, materiales y procesos técnicos a los sectores estratégicos. En los últimos años, el país ha registrado avances significativos en este ámbito.
El número de empresas ha crecido rápidamente, su escala se ha ampliado y su nivel tecnológico ha mejorado de manera notable. Destacan las compañías mecánicas de Bac Ninh, Ciudad Ho Chi Minh y Dong Nai, que han invertido fuertemente en maquinaria moderna, sistema de la planificación de recursos empresariales (ERP), equipos de mecanizado CNC, robots de soldadura y líneas de automatización.
Como resultado, productos como componentes plásticos técnicos, moldes y piezas metálicas de precisión cumplen ya con estándares internacionales e inician su integración en cadenas de suministro globales. Programas de cooperación entre el Ministerio de Industria y Comercio y Samsung Vietnam, enfocados en consultoría y formación de fábricas inteligentes, han permitido a cientos de empresas elevar su nivel de fábrica inteligente de 0,9 a 2,1 puntos, reflejando la eficacia de la transformación tecnológica en la productividad y la calidad.
Según Chu Viet Cuong, director del Centro de Apoyo al Desarrollo Industrial, el país cuenta actualmente con cerca de 7.000 empresas de la industria de apoyo, concentradas en cinco sectores: mecánica, automotriz, eléctrica-electrónica, textil-confección y alta tecnología. De ellas, unas 300 ya participan en las cadenas de suministro de grandes grupos con inversión extranjera directa (IED), como Samsung, Toyota, Honda y LG.
No obstante, pese a estos logros, la industria de apoyo vietnamita sigue siendo un eslabón débil dentro de la cadena de valor global. Muchas empresas se limitan a procesos de mecanizado simples, con bajo valor agregado y sin capacidad suficiente para diseñar, fabricar o dominar tecnologías clave. Esta situación mantiene la dependencia tecnológica y dificulta el fortalecimiento de marcas y contenido local.
Cao Van Hung, director de Desarrollo de Mercados Internacionales de la empresa Smart Vietnam, subraya que aumentar el contenido tecnológico es clave para la competitividad. Solo así las empresas podrán escapar de la trampa de la maquila de bajo valor y afrontar los cambios del mercado.
Para consolidar la industria de apoyo como un verdadero pilar del sector productivo, expertos coinciden en que su desarrollo debe basarse en la cooperación estrecha entre el Estado, las empresas, los institutos de investigación, universidades y asociaciones sectoriales, con las empresas como eje central, para facilitar la difusión tecnológica y la formación de cadenas de suministro sostenibles.
En este sentido, Nguyen Van, vicepresidente de la Asociación de Empresas de la Industria de Apoyo de Hanoi, propone la creación de una ley específica para el sector que defina incentivos en crédito, impuestos y suelo; impulse la investigación y desarrollo; fomente parques tecnológicos y complejos industriales de alta tecnología integrados; y, a corto plazo, implemente de manera efectiva el Decreto No. 205/2025/ND-CP mediante programas de apoyo financiero, capacitación técnica y creación de centros sectoriales de innovación.
Desde la perspectiva empresarial, Nguyen Van enfatiza que, una vez que el Estado asuma su rol facilitador, las empresas deben considerar la inversión en tecnología e innovación como una estrategia vital. Además, resulta fundamental intensificar la cooperación con institutos de investigación, universidades y empresas con inversión extranjera directa para asegurar transferencia tecnológica y formación de recursos humanos altamente calificados.
El desarrollo de la industria de apoyo no solo es una exigencia de la economía de mercado, sino también una tarea estratégica para construir una industria independiente, autónoma y moderna, vinculada al fortalecimiento del potencial de defensa y seguridad nacional./.