El presidente vietnamita Truong Tan Sang, exhortó a la provincia norteña de Quang Ninh a dedicar todos esfuerzos para ayudar a las personas afectadas por las inundaciones prolongadas y recuperar prontamente la estabilidad para la vida y producción comunitaria.
Durante un trabajo de campo para inspeccionar y dirigir las labores de mitigación de las consecuencias del desastre natural en la localidad, el jefe de Estado instó a las autoridades territoriales y el sector de producción carbonera a movilizar distintas fuentes de fuerza para la remodelación de infraestructura.
Tras destacar la oportuna prestación de asistencia a lugares damnificados de los órganos involucrados y la cooperación de la Confederación nacional de Trabajo, advirtió algunas deficiencias en las tareas concernientes.
Exigió garantizar el flujo del sistema de alcantarillado, hacer una planificación adecuada para reubicar los residentes, construcción de minas a cielo abierto y emisión de residuos en el proceso de producción del mineral.
El mismo día, realizó un recorrido por las empresas carboneras locales Nui Beo y Mong Duong para valorar la superación de las secuelas causadas por torrenciales lluvias en los últimos días y visitó también el Hospital Quang Ninh para animar a las familias afectadas.
Por su parte, el vicepremier Nguyen Xuan Phuc urgió a los poderes locales de Quang Ninh y la provincia de Lang Son adoptar medidas preventivas contra epidemias, fomentar el respaldo a los residentes en el acceso a alimentos, agua portable, electricidad y productos esenciales.
Enfatizó en la importancia de asegurar la seguridad de los embalses, revisar la planificación residencial en zonas vulnerables y encargó al Ministerio de Finanzas considerar prontamente el equipamiento de medios necesarios a Quang Ninh.
Patentizó apoyo para la provisión de 100 toneladas de arroz a la provincia y el plan de evacuación de pobladores a áreas seguras.
Según fuentes oficiales, se registran del 25 de julio a 4 de agosto en Quang Ninh 17 muertos, 30 heridos y una pérdida material de hasta 130 millones de dólares con 339 viviendas destruidas, nueve mil casas bajo el agua y cuatro mil hectáreas de suelo cultivado deterioradas.
Se interrumpieron operaciones en todos los campos de explotación carbonera por deslizamiento de tierra e inundaciones, debido a lo cual, 30 mil obreros se vieron obligados a suspender temporalmente su trabajo.
Respecto a la producción provincial de carbón, se estima que los daños ascendieron a 57 millones de dólares. Los yacimientos de las compañías Mong Duong y 790 figuran como los más afectados y especialistas adelantaron que se necesitarán al menos tres meses para recobrar sus operaciones.
Con el fin de superar las consecuencias del desastre natural, las autoridades locales se empeñan en descombrar las vías de comunicación, suministrar agua potable mediante el establecimiento de una tubería provisional y consolidar los diques y represas. – VNA