La congresista estadounidense Madeleine Bordallo exhortó a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) a establecer un marco para resolver efectivamente las exigencias y disputas sobre soberanía.

En una declaración de prensa, publicada ayer, la representante de la isla Guam manifestó su profunda preocupación ante las acciones de China en el Mar Oriental considerándolas como causa de la inestabilidad y perjuicio para los esfuerzos por mantener la paz en la región.

La congresista también llamó a las partes concernientes a volver a la mesa de las negociaciones para resolver el problema.

Anteriormente, en su comparecencia ante el Congreso estadounidense, el asistente del secretario de Estado para asuntos de Asia Oriental – Pacífico, Daniel Russel, calificó las acciones chinas en el Mar Oriental de gran reto para Estados Unidos y los países en la región.

La mejor medida que Washington y la ASEAN pueden adoptar para aliviar la tensión es mediante diálogos diplomáticos con espíritu constructivo, afirmó, a la vez que subrayó la importancia del rechazo internacional contra las acciones unilaterales de Beijing, tendentes a cambiar el estado actual en el Mar Oriental.

La Corporación Nacional de Petróleo Submarino de China emplazó el 2 de mayo la perforadora Haiyang Shiyou – 981 en una zona a 15 grados 29 minutos 58 segundos de latitud Norte y 111 grados 12 minutos 6 segundos de longitud Este, ubicada absolutamente en la zona económica exclusiva y la plataforma continental de Vietnam, a unas 120 millas náuticas de su costa.

El gobierno chino movilizó casi 90 barcos armados, incluidos militares, para escoltar su plataforma y prohibió además ilegalmente a las embarcaciones de otros países navegar en la zona a tres millas náuticas de esa plataforma.

Esa acción unilateral de la parte china constituye una grave violación a la soberanía, los derechos jurisdiccionales de Vietnam, refrendados en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 (UNCLOS) y va en contra de las leyes internacionales y la Declaración de Conducta en el Mar Oriental entre la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia y China (DOC), firmada en 2002. – VNA