Vietnam debe fomentar sus esfuerzos en la reforma de políticas financieras aplicadas a combustibles fósiles para cumplir con eficiencia su estrategia del desarrollo verde y proceder a un progreso más sostenible.

La asesora sobre políticas económicas del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Michaela Prokop, formuló esa recomendación en un informe presentado una reunión de balance, efectuada la víspera en Hanoi.

Agregó que el reajuste de los reglamentos al respecto brindará al país ciertos beneficios, entre ellos, el aumento de la productividad, fuentes suministradores y Producto Interno Bruto, la garantía de seguridad energética nacional, la disminución de la carga financiera y la conservación ambiental.

Por otro lado, se requiere una modificación integral tanto en los precios como en las estrategias mediática y consultiva, y también la elaboración de medidas para proteger a los pobres y las empresas más afectadas por la subida del precio de energía, enfatizó.

Según datos oficiales, Vietnam dedicó en el quinquenio 2007-2012 unos cinco mil millones de dólares para el subsidio de carburantes fósiles, mediante asistencias crediticias o preferencias a los productores y distribuidores domésticos.- VNA