Hanoi (VNA) - La visita de Estado del rey Felipe y la reina Matilde de Bélgica a Vietnam es clave para fortalecer aún más la relación bilateral, destacando que el país indochino se ha convertido en un socio confiable y estable para Bélgica en el contexto internacional actual, caracterizado por muchos cambios.
Así lo reiteró el embajador belga en Hanoi, Karl Van den Bossche, en una entrevista concedida a la Agencia Vietnamita de Noticias (VNA), en ocasión de la próxima visita de los monarcas belgas, del 31 de marzo al 4 de abril.
El embajador resaltó que, aunque originalmente estaba planificada para el año pasado, la visita tuvo que ser pospuesta debido a la falta de un nuevo gobierno federal en Bélgica. Sin embargo, después de la formación del nuevo gobierno en enero de 2025, la visita fue reactivada, lo que subraya la relevancia de las relaciones bilaterales entre ambos países.
Esta será la primera visita oficial de Estado del Rey y la Reina a la nación sudesteasiática, y estarán acompañados por importantes miembros del gobierno belga.
Van den Bossche recordó que el rey de Bélgica ya visitó Vietnam en 1994, cuando el país aún atravesaba dificultades. La relación especial de los monarcas belgas con el país indochino se refleja en visitas anteriores, como la de la reina en mayo de 2023, en su rol como presidenta honoraria de UNICEF Bélgica.
La próxima estancia no solo subraya la relevancia de Vietnam en la diplomacia belga, sino también el progreso significativo del país en términos económicos y geopolíticos en los últimos años.
En cuanto a la evolución de las relaciones bilaterales, el embajador destacó que la cooperación entre Bélgica y Vietnam ha superado los 50 años, fortaleciendo vínculos en áreas como el desarrollo, la cultura, la educación, la agricultura y la lucha contra el cambio climático.
Señaló que Bélgica fue uno de los primeros países occidentales en establecer vínculos diplomáticos y de cooperación con Vietnam en 1973, y desde entonces, esa colaboración ha crecido en sectores clave como la agricultura, la cultura, la educación y el medio ambiente.
Uno de los logros más notables en las relaciones económicas entre ambos países es la colaboración en el sector agrícola y alimentario. Desde la firma del Acuerdo de Asociación Estratégica en Agricultura en 2018, productos como el cacao se han convertido en una pieza clave de la cooperación bilateral.
Las empresas belgas valoran la alta calidad del cacao vietnamita, y Puratos Grande-Place, una destacada empresa belga, compra cerca del 70% de la producción de cacao de Vietnam para fabricar chocolate directamente en el país indochino.
Bélgica también desempeña un papel crucial en el sector portuario y logístico, con el proyecto DEEP C en Hai Phong, una zona industrial y puerto desarrollada por inversores belgas.
Esta visita también hará hincapié en la cooperación medioambiental y el desarrollo de energías renovables. El embajador mencionó que Bélgica está colaborando estrechamente con Vietnam en el impulso de soluciones económicas verdes y energías limpias, y que se firmarán nuevos proyectos en estos ámbitos durante el viaje.
Uno de los principales objetivos es apoyar a Vietnam en su transición hacia una economía verde y sostenible. Además, en el marco de la lucha contra el cambio climático, ambos países continuarán trabajando juntos para mitigar los impactos de este fenómeno global.
Un aspecto relevante de la cooperación bilateral es el apoyo mutuo en la resolución de las consecuencias de la dioxina y el agente naranja.
El embajador destacó la resolución aprobada por la Cámara de Representantes de Bélgica en octubre de 2023, que respalda a las víctimas del agente naranja, lo cual refleja el fuerte apoyo del país europeo a Hanoi en este tema.
Van den Bossche también mencionó que ha visitado varias localidades vietnamitas afectadas por el agente naranja y mantiene estrechas relaciones con organizaciones como la Asociación de Víctimas del Agente Naranja de Vietnam (VAVA) y con la activista Tran To Nga.
Expresó su esperanza de que, a través de esta visita, Bélgica pueda transferir tecnología para la descontaminación de suelos afectados por dioxina, lo que abrirá nuevas oportunidades para abordar las consecuencias a largo plazo de la guerra.
Bélgica y Vietnam también mantienen una cooperación significativa en el marco de la Francofonía, especialmente a través de la delegación de Wallonie-Bruxelles en el país indochino. Esta delegación ha jugado un papel fundamental en la promoción de proyectos de cooperación durante casi 30 años, fortaleciendo las relaciones entre ambos países.
Además de los vínculos bilaterales, esta colaboración tiene un impacto positivo en toda la región del Sudeste Asiático, con más de 800 proyectos implementados en áreas como la salud, la agricultura sostenible, la protección del medio ambiente y la enseñanza del francés.
En cuanto a las perspectivas futuras, el embajador destacó que la visita de Estado del Rey y la Reina de Bélgica abrirá nuevas oportunidades de cooperación, especialmente en áreas como la educación, la economía y el medio ambiente.
En esta ocasión, se firmarán memorandos de entendimiento entre universidades de ambos países, lo que fortalecerá la necesidad de enfrentar juntos los desafíos geopolíticos y globales.
Además, el embajador destacó que esta será una oportunidad para que Bélgica presente nuevas tecnologías en el campo de la descontaminación de suelos, así como para seguir promoviendo la cooperación en energía y medio ambiente, lo que traerá beneficios concretos para ambas naciones.
Por último, Van den Bossche concluyó que esta visita marcará un hito importante en el fortalecimiento de las relaciones entre Vietnam y Bélgica, abriendo nuevas perspectivas de cooperación no solo en los sectores actuales, sino también en áreas emergentes, generando beneficios concretos para los dos países./.
