
Hanoi (VNA) - Para controlar la pandemia de COVID-19, los países de la Asociaciónde Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) deben aumentar el acceso a diferentesfuentes de vacunas para una vacunación a gran escala, hacia la inmunidadcolectiva para 2022.
Así lo destacaronhoy los expertos vietnamitas e internacionales durante un simposio virtualsobre la lucha antiepidémica en la región, organizado por la Universidad deCiencias Sociales y Humanidades de la Universidad Nacional de Vietnam, encolaboración con la organización alemana Konrad Adenauer Stiftung.
Durante elevento, los delegados analizaron los diferentes impactos del COVID-19 en lospaíses del Sudeste Asiático y discutieron las medidas para enfrentar lapandemia en cada nación y la cooperación intrarregional en respuesta a ese mal.
En talsentido, sugirieron políticas para responder a la pandemia en la región, centrándoseen la implementación de paquetes de estímulo económico, el levantamientogradual de las medidas de bloqueo y distanciamiento social y la restauración delas actividades económicas.
CaitlinWiesen, representante del Programa de las Naciones Unidas para elDesarrollo (PNUD) en Vietnam, dijo que los países del Sudeste Asiático hanendurecido los controles fronterizos en medio de los complicados desarrollosde la epidemia en la región.
Vietnamtiene un plan para establecer un fondo de vacunas por valor de mil millones dedólares, y la Asamblea Nacional también dedicó 500 millones de dólares paraacelerar la compra de vacunas de diferentes fuentes, indicó.
Al mismotiempo, señaló, Vietnam aspira a producir sus propias vacunas al registrarsecon la Organización Mundial de la Salud para convertirse en uno de los posiblescentros de producción de esos fármacos a nivel regional.
Vietnam esel único país de la ASEAN y uno de los pocos del mundo con un crecimientoeconómico en 2020, pese al impacto del COVID-19, destacó.
El profesorasociado y doctor Nguyen Huy Hoang (del Instituto de Estudios del SudesteAsiático) reiteró que el Sudeste Asiático fue una de las primeras regionesafectadas por el COVID-19.
Hasta el 24de mayo, dijo, la ASEAN reportó más de 3,8 millones de casos del coronavirus,con casi 76 mil muertes.
Laseconomías de los países de la región se vieron gravemente afectadas. La rápidapropagación de COVID-19 resultó en la ruptura de las cadenas de suministro y lalimitación de los viajes, las actividades del comercio y la inversión.
En esecontexto, indicó, las agencias de respuesta de emergencia y salud pública de laASEAN actuaron rápidamente al compartir información y las medidas necesarias encada reunión a nivel regional sobre la pandemia de COVID-19.
Los líderesde la ASEAN propusieron reasignar los recursos disponibles para combatir laepidemia y establecer un Fondo de Respuesta regional para el COVID-19./.