Cada año, cientos de miles de indonesios van al Haj a Arabia Saudita, donde seencuentran los dos sitios más sagrados del Islam: La Meca y Medina.
Para muchos indonesios, la peregrinación religiosa es un evento único en lavida, con un tiempo de espera promedio de 20 años debido a un sistema decuotas.
Las autoridades sauditas ya han dicho que las peregrinaciones de Haj y Umrah,que atraen a millones de viajeros de todo el mundo, permanecerán suspendidashasta nuevo aviso.
Fachrul Razi explicó que la decisión de cancelar el Haj este año se tomó debidoa las preocupaciones sobre el nuevo coronavirus y las restricciones de viaje aúnen vigor.
La cuota para los peregrinos indonesios este año fue de 221 mil, con más del 90por ciento ya registrado para ir, según el sitio web del Ministerio de asuntosreligiosos.
Mientras tanto, tailandeses empezaron a visitar templos y pagodas cuando lasrestricciones por el COVID-19 se flexibilizan. Sin embargo, aún es obligatorioel uso de mascarillas y el chequeo de temperatura corporal en lugarespúblicos./.