Hanoi (VNA) - La economía de Vietnam superó en 2020 desafíos y dificultades sin precedentes, gracias en buena medida a las políticas monetarias flexibles y prudentes.
Esas herramientas, acompañadas por otras efectivas políticas macroeconómicas, contribuyeron a controlar la inflación, estabilizar la macroeconomía y el mercado de divisas, y propiciar la recuperación económica.
La recesión global causada por la crisis del COVID-19 obligó a los gobiernos y bancos centrales a flexibilizar sus políticas monetarias a nivel sin precedentes y adoptar medidas de estímulo fiscal a gran escala para recuperar la economía.
Vietnam no fue una excepción. Ante los desafíos, el Banco Estatal tomó la iniciativa para desplegar nuevas herramientas monetarias y crediticias con el fin de rescatar la economía. La entidad fue uno de los bancos centrales que reaccionaron de forma más lista, temprana y firme en la región.
Bui Thuy Hang, subjefa del Departamento de Políticas Monetarias del Banco Estatal, informó que la entidad gestionó de manera flexible y con sintonía los instrumentos de divisas, garantizando así la liquidez del sistema crediticio y la estabilidad del mercado monetario, al tiempo que creó la plataforma básica para la reducción de las tasas de interés.
En 2020, el Banco Estatal redujo, en tres ocasiones, la tasa de interés entre 1,5 y dos por ciento, hecho que convirtió a Vietnam en uno de los países con la mayor disminución en la región del Sudeste Asiático.
Expertos consideran que las decisiones del Banco Estatal y la respuesta sintónica de los bancos llevaron las tasas de interés al nivel más bajo durante los últimos años.
Vo Tri Thanh, director del Instituto de estudios sobre estrategias de marca y competencia, las políticas del Banco Estatal facilitaron el accionar tanto de los bancos como de las empresas.
Además, precisó, el momento de adoptar las decisiones y la escala de los reajustes fueron apropiados para apoyar la economía sin dañar la estabilidad macroeconómica y el control de la inflación.
El economista Nguyen Tri Hieu evaluó que la gestión proactiva y en sintonía con el ritmo de crecimiento de la economía contribuyó de forma importante a la recuperación de los negocios y al mantenimiento de la expansión económica tras la pandemia.
Por su parte, el vicegobernador del Banco Estatal, Dao Minh Tu, aseguró que el banco central mantendrá las políticas monetarias activas, flexibles y compatibles con otras herramientas macroeconómicas para controlar la inflación, mantener la estabilidad y acelerar la recuperación de la economía.
El Banco Estatal impulsará el proyecto de desarrollo del pago sin efectivo y estimulará a las instituciones crediticias a minimizar los gastos para reducir la tasa de interés de los préstamos y garantizar la calidad y seguridad de los créditos.
El sector bancario incrementará el financiamiento para los sectores prioritarios, a la par de fortalecer el control de las ramas con riesgos potenciales, añadió.
Nguyen Trong Du, representante de la Inspección bancaria, aseguró que se intensificará la supervisión de las instituciones crediticias. Además, las entidades ineficientes se reestructurarán en concordancia con los principios de la economía de mercado./.