Hanoi (VNA) Con la política de tomar a las personas como el centro de las actividades y no dejar a nadie atrás, el Gobierno de Vietnam, en el contexto de la evolución complicada de la COVID-19 en el país, ha lanzado orientaciones directas y drásticas para apoyar a los trabajadores en superar las dificultades y estabilizar la vida.
Durante una entrevista con la Agencia Vietnamita de Noticias sobre el tema, la directora de la oficina de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Hanoi, Ingrid Christensen, dijo que en esta coyuntura pandémica, el Gobierno de la nación indochina ha preparado los paquetes del bienestar social con la mayor cobertura y escala de beneficiarios hasta el momento.
Sobre la base de los recursos nacionales y el contexto del momento, el gabinete vietnamita ha hecho grandes esfuerzos, con vistas a limitar el impacto negativo de la enfermedad, alabó.
Luego de consultar con la Confederación General del Trabajo (VGCL), la Cámara de Industria y Comercio (VCCI) y la Alianza de Cooperativas (VCA), el Gobierno de Vietnam ha implementado diversos paquetes crediticios de apoyo a través de diferentes políticas en términos de impuestos, capitales y bienestar social, a fin de mantener los puestos laborales y ayudar a las empresas y los trabajadores, evaluó.
Ingrid Christensen resaltó el apoyo del Gobierno vietnamita mediante esos paquetes, especialmente los ajustes de impuestos a favor de las empresas, lo cual les permite continuar desarrollando las actividades de producción y negocios y el mantenimiento de empleos a los trabajadores.
Asimismo, la asistencia busca facilitar a las empresas el acceso a los préstamos para que puedan pagar salarios a los trabajadores y los seguros sociales y de desempleo y cuotas sindicales, agregó.
De acuerdo con el Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales de Vietnam, el mercado laboral del país ha alcanzado en los últimos tiempos pasos de desarrollo notables tanto en escala como en calidad, modernizándose e integrándose gradualmente al mundo.
En concreto, la escala de la fuerza laboral luce cada día más amplia, mientras la oferta es garantizada con más de 51,6 millones de personas.
La calidad de la mano de obra va en aumento y la tasa de formación crece año tras año.
Sin embargo, el “choque” de la COVID-19 ha revelado insuficiencias como la presión para crear puestos laborales para casi dos millones de trabajadores, quienes abandonan el mercado laboral y la escasez de mano de obra en una serie de industrias.
La situación requiere que el mercado laboral aumente su capacidad de resistir influencias internas y externas para poder desarrollarse de manera sostenible.
Con esfuerzos para proteger a las personas durante el tiempo de la pandemia y el hecho de destacar la importancia de las cuestiones sociales posteriores a la COVID-19, Vietnam se está recuperando bien, alabó Ingrid Christensen.
Sin embargo, con posibles crisis por delante, los desafíos económicos y del mercado laboral aún pueden ser problemas a enfrentar y tener en cuenta en el país en los próximos tiempos, consideró.
Para alcanzar los objetivos de convertirse en una nación de ingresos medianos altos en 2030 y un estado desarrollado de renta alta en 2045, Vietnam necesita acelerar el ritmo de la mejora social junto con el perfeccionamiento económico, comunicó.
Fortalecer la base macroeconómica y mantener una inversión adecuada y regular en la protección social se encuentran entre los factores claves para que Vietnam supere los desafíos y mantenga un desarrollo inclusivo y sostenible, habló.
Al evaluar los esfuerzos en la formación profesional para trabajadores rurales en las localidades vietnamitas con el objetivo de crear nuevos puestos laborales y aumentar el ingreso a los empleados, Ingrid Christensen citó las estadísticas del Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales de la nación indochina y dijo que un total de 4,57 millones de obreros rurales fueron apoyados en el campo, entre ellos, cuatro millones consiguieron ocupación luego de los recursos, alcanzando un promedio de 89,3 por ciento en la etapa 2016.2020.
En los próximos tiempos, la Organización Internacional del Trabajo seguirá cooperando con el Departamento de Educación Profesional de la mencionada cartera para elevar la capacidad de los trabajadores rurales mediante los proyectos de colaboración y desarrollo en el campo, concluyó./.