En una reciente conferencia de prensa en línea, la Agencia de Estadísticas delpaís sudesteasiático (PSA) informó que la economía nacional en el periodoregistró una merma interanual de 16,5 por ciento, mucho más alto que la caídadel 0,7 por ciento en el primer trimestre y la mayor reducción trimestralreportada desde 1981.
En medio del complicado desarrollo de la pandemia de COVID-19 en Filipinas, elnuevo aumento del número de casos infectados obligó al Gobierno a reimponer lasmedidas de control y prevención más estrictas en Manila y las provinciasvecinas en las próximas dos semanas, lo que puede crear más afectaciones a laeconomía del país.
Según Nicholas Antonio Mapa, economista del Grupo de finanzas bancarias yseguro ING, la economía filipina cayó en recesión con el declive delcrecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en dos trimestres consecutivos, lo que muestra el impacto de las medidas de restricción en una economíabasada en el consumo.
En consecuencia, pronosticó que la tasa de desempleo en el país podría alcanzarun nivel récord en los próximos meses.
Actualmente, el Banco Central de Filipinas también recortó las tasas de interésen 2020 en 175 puntos básicos a un mínimo histórico de 2,25 por ciento.
Por otro lado, Camboya estimó, para el peor de los casos, una pérdida de cercade tres mil millones de dólares en ingresos por el turismo extranjero,provocando que la contribución de la industria sin humo al PIB caiga del 12 amenos del 10 por ciento.
En la mejor situación, el turismo de Camboya necesitará cinco años pararecuperarse como la etapa antes de la pandemia.
El país indochino brindó servicios a más de 1,18 millones de visitantes extranjeros en los primerosseis meses del año, lo que significa una disminución del 64,6 por ciento encomparación con el mismo lapso del año anterior.
Se espera que el número de turistas foráneos en Camboya aumente entre un 25 y35 por ciento en 2021, para generar una facturación de aproximadamente dos milmillones de dólares y contribuir a la creación de 500 mil empleos./.