An Giang, Vietnam- Después de los éxitos de la implementación de la Resolución 120 del gobierno sobre el desarrollo sostenible del delta del río Mekong, Vietnam continuó el año pasado cosechando los resultados notables en la adaptación al cambio climático.
Entre los avances sobresalieron la implementación de las contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC, en sus siglas en inglés) y la emisión del plan nacional de adaptación al cambio climático para la etapa 2021-2030 con visión hasta 2050 (NAP).
Actualmente, el borrador del proyecto “Nueva planificación del delta del río Mekong” se perfecciona para movilizar y aprovechar los recursos que permitan convertir a esta región en una zona desarrollada en 2025.
Cambios positivos
Durante un reciente seminario sobre el desarrollo sostenible del delta del Mekong para adaptarse al cambio climático, el viceministro de Recursos Naturales y Medio Ambiente Le Cong Thanh reiteró que este fenómeno climático es cada día más feroz e impredecible, afectando gravemente a todos los aspectos socioeconómicos.
En Vietnam, el gobierno emitió diferentes políticas y desplegó una serie de acciones importantes para adaptarse a los crecientes impactos del cambio climático. Uno de los éxitos en 2020 constituyó el cumplimiento de la actualización de NDC y la emisión de NAP.
De ese modo, los contenidos de NDC se concentraron en fomentar la gestión estatal y de recursos, intensificar la resiliencia y mejorar la capacidad de adaptación para la comunidad, a la par de minimizar los riesgos de desastres naturales.
Mientras tanto, la NAP de Vietnam se enfocó en la implementación de las tareas específicas en siete campos afectados severamente por el cambio climático. En particular, una serie de tareas se centrarán en el enfrentamiento al cambio climático en el delta del Mekong, el más damnificado por este fenómeno en Vietnam.
En 2016, el gobierno emitió la resolución 120 con varias tareas y soluciones generales tanto a corto como a largo plazo, lo que marcó un gran avance en la reflexión sobre la configuración de una estrategia del desarrollo sostenible para el delta del Mekong hacia la dirección general, con una visión de largo plazo.
Después de más tres años de implementación, las tareas de esa resolución lograron resultados importantes. La determinación del gobierno vietnamita recibió atención y apoyo de muchos socios y la comunidad internacional.
Según Tran Anh Thu, vicepresidente del Comité Popular de la provincia de An Giang, una de las más afectadas por el cambio climático, la economía regional sufrió impactos graves durante la histórica sequía salina del período 2015-2016, y solo las provincias de Bac Lieu y Ca Mau reportaron crecimiento económico gracias a sus sistemas de producción acostumbrados a la sal.
En cuanto a las relaciones con Ciudad Ho Chi Minh, también propuso construir un sistema logístico y solucionar problemas pendientes para que el delta del Mekong se convierta en una plataforma de desarrollo para esa urbe y todo el país.
Planificación para atraer recursos
Tran Quoc Phuong, viceministro de Planificación e Inversión, agencia que publicó recientemente el borrador del proyecto mencionado, reiteró que este programa incluye tres puntos de vista.
El primero es respetar el funcionamiento natural del ecosistema y adaptarse de manera proactiva al cambio climático, y considerar el agua salada y salobre como recursos naturales para el desarrollo.
El segundo es considerar el cambio climático no sólo como un desafío sino también como una oportunidad para transformar los modelos de producción.
Lo último es cambiar el pensamiento sobre la seguridad alimentaria, desarrollar la agricultura de alta calidad, en combinación con los servicios, ecoturismo e industria con el enfoque para fortalecer el área de procesamiento y la mejora del valor y la competitividad de los productos agrícolas.
Al patentizar el apoyo de los Paises Bajos, la embajadora holandesa acreditada en Vietnam, Alsbeth Akkerman, valoró que los dos países figuran entre los más afectados por el cambio climático.
Por tal motivo, recomendó continuar la colaboración bilateral para buscar las medidas en aras de de consolidar el enfrentamiento al cambio climático, especialmente en el delta del Mekong, hacia la meta del desarrollo sostenible y la adaptación a este fenómeno en Vietnam.
En concreto, sugirió a Vietnam elaborar mecanismos financieros para cumplir ese objetivo con los recursos financieros limitados, la mayoría de ellos provenientes del gobierno.
Además, realzó la importancia de los fondos privados y la forma de Cooperación Público-Privada (PPP) para el desarrollo sostenible global./.