Altos funcionarios de los países de la Subregión del río Mekong efectuaron este jueves su cuarta reunión de la Iniciativa Interministerial contra la trata de personas (COMMIT) en la capital cambodiana de Phnom Penh.
La reunión, con la presencia de representantes de China, Myanmar, Tailandia, Laos, Cambodia y Vietnam y organizaciones internacionales, aprobó el plan de acción en la etapa 2015-2018 y la segunda Declaración conjunta, reafirmando la determinación de estrechar la colaboración en el combate contra la trata de personas, sobre todo mujeres y niños.
Al intervenir en el acto inaugural, el viceprimer ministro y titular de Interior del país anfitrión, Sar Kheng, aseveró que el tráfico humano es una violación seria a los derechos humanos, provocando grandes dolores para las víctimas y sus familias.
Exhortó a las naciones subregionales a elevar la eficiencia de las actividades cooperativas y preventivas contra ese mal.
Por su parte, el viceministro vietnamita de Seguridad Pública Le Quy Vuong afirmó los compromisos del gobierno de su país en la implementación del programa nacional en esta materia en el período 2016-2020.
Patentizó la necesidad de fomentar el papel de coordinación y conexión de los organismos de Naciones Unidas e intensificar más los mecanismos de cooperación e intercambio de informaciones al respecto.
Durante la cita, los funcionarios de seis naciones ribereñas también acordaron las medidas de cooperación multilateral y las nuevas iniciativas en la construcción de las relaciones de contrapartes con el sector privado y los medios de comunicaciones en el combate contra ese flagelo.
Según estadísticas, unas 20 millones 900 mil personas constituyen víctimas del trabajo forzado y explotación sexual, de ellos 11 millones 400 mil son mujeres y niñas y cinco millones 500 mil del tráfico humano.
La Subregión del río Mekong se considera como una de las áreas más afectadas por esa delincuencia.-VNA
La reunión, con la presencia de representantes de China, Myanmar, Tailandia, Laos, Cambodia y Vietnam y organizaciones internacionales, aprobó el plan de acción en la etapa 2015-2018 y la segunda Declaración conjunta, reafirmando la determinación de estrechar la colaboración en el combate contra la trata de personas, sobre todo mujeres y niños.
Al intervenir en el acto inaugural, el viceprimer ministro y titular de Interior del país anfitrión, Sar Kheng, aseveró que el tráfico humano es una violación seria a los derechos humanos, provocando grandes dolores para las víctimas y sus familias.
Exhortó a las naciones subregionales a elevar la eficiencia de las actividades cooperativas y preventivas contra ese mal.
Por su parte, el viceministro vietnamita de Seguridad Pública Le Quy Vuong afirmó los compromisos del gobierno de su país en la implementación del programa nacional en esta materia en el período 2016-2020.
Patentizó la necesidad de fomentar el papel de coordinación y conexión de los organismos de Naciones Unidas e intensificar más los mecanismos de cooperación e intercambio de informaciones al respecto.
Durante la cita, los funcionarios de seis naciones ribereñas también acordaron las medidas de cooperación multilateral y las nuevas iniciativas en la construcción de las relaciones de contrapartes con el sector privado y los medios de comunicaciones en el combate contra ese flagelo.
Según estadísticas, unas 20 millones 900 mil personas constituyen víctimas del trabajo forzado y explotación sexual, de ellos 11 millones 400 mil son mujeres y niñas y cinco millones 500 mil del tráfico humano.
La Subregión del río Mekong se considera como una de las áreas más afectadas por esa delincuencia.-VNA