Hanoi (VNA) - El Banco Mundial (BM) publicó un informe que describe cómo Vietnam puede mejorar su participación en las cadenas de valor globales para convertirse en un país de altos ingresos para 2045.
En su informe titulado “Vietnam 2045: Progresar en un mundo cambiante - Caminos hacia un futuro de altos ingresos”, el BM dijo que la integración en los mercados globales ha sido el motor clave del éxito del desarrollo de la nación indochina en los últimos 40 años, impulsando una de las expansiones económicas más largas y rápidas en la historia moderna.
Hoy, Vietnam es una de las economías más abiertas del mundo, con aproximadamente la mitad del Producto Interno Bruto (PIB) del país y uno de cada dos empleos, directa e indirectamente, dependiendo de las exportaciones.
Basándose en su éxito pasado, Vietnam ha establecido metas ambiciosas para el futuro, con el objetivo de convertirse en una economía moderna de altos ingresos para 2045. Esto requiere sostener un crecimiento anual del PIB per cápita de alrededor del 6% durante las próximas dos décadas.
El logro de este objetivo dependerá de la capacidad de Vietnam para ascender en la cadena de valor, avanzando hacia la fabricación y los servicios de mayor valor agregado mediante inversiones en tecnología, habilidades e innovación. Y Vietnam tendrá que gestionar esta transformación en un contexto de mayor incertidumbre mundial y cambios profundos en el sistema de comercio mundial.
“Para mantener un crecimiento rápido, Vietnam tendrá que pasar de un ensamblaje final intensivo en mano de obra y de bajo valor agregado a una fabricación y servicios de mayor valor agregado”, explicó Manuela V. Ferro, vicepresidenta del BM para Asia Oriental y el Pacífico.
Además, en medio de los cambios en el comercio mundial y la creciente incertidumbre, la diversificación de las alianzas comerciales y de inversión será esencial para generar resiliencia y garantizar el éxito a largo plazo, reiteró.
El BM propuso un enfoque multifacético para aumentar la productividad, atraer inversión privada y mejorar la participación en las cadenas de valor mundiales.
Las opciones de política incluyen la profundización de la integración comercial regional; vincular a las empresas nacionales a las cadenas de suministro mundiales; promover la fabricación intensiva en habilidades y tecnología y los servicios de alto valor agregado, y la transición a una producción con bajas emisiones de carbono y resiliente al clima./.