Hanoi (VNA)- El liderazgo acertado del Partido es el factor decisivo de la Gran Victoria de Primavera 1975, subrayó el general Luong Cuong, jefe del Departamento General de Política del Ejército Popular de Vietnam.
En un artículo publicado la víspera en el periódico Quan Doi Nhan Dan (Ejército Popular), Luong Cuong dijo que la hazaña marca una de las páginas más gloriosas de la historia nacional y constituye un símbolo brillante del heroísmo revolucionario y la inteligencia humana.
Tras el Acuerdo de Ginebra, firmado en 1954, el territorio de Vietnam fue dividido temporalmente en dos. El Norte logró la independencia absoluta y entró en un periodo de transición al socialismo, mientras el Sur permanecía bajo el doble yugo de los imperialistas estadounidenses y sus lacayos.
En este contexto, el Partido Comunista fijó dos tareas estratégicas: llevar a cabo la revolución socialista en el Norte y liberar el Sur de la administración de Estados Unidos y el gobierno títere, en pos de la reunificación nacional.
En la Ofensiva General de Primavera 1975, con la determinación de librar por completo la región sureña, tras evaluar la situación, el Partido eligió correctamente la estrategia y los objetivos ofensivos principales, lo que marcó un viraje fundamental del escenario de la guerra.
Durante la resistencia contra Estados Unidos, el Partido organizó y gradualmente llevó la guerra popular a su máximo desarrollo, al movilizar la participación de todo el pueblo en la lucha contra los invasores; puso en juego la fuerza combinada y de la retaguardia del norte, que luchó, construyó y proveyó recursos humanos y materiales para el frente del sur.
El Partido aplicó consistente y creativamente la idea de que el camino revolucionario del Sur debe ser un proceso revolucionario radical, con dos fuerzas principales: la fuerza política y la fuerza armada, combinando la lucha militar con la política y la diplomática, la guerra de guerrillas y la guerra regular.
La Ofensiva General de Primavera 1975 fue la culminación de una combinación de ofensiva y rebelión destinada a derrotar y desintegrar a toda la fuerza enemiga, poniendo fin a la guerra en poco tiempo, y demostrando el talento militar, la creatividad y la decisión acertada del Partido.
El acontecimiento es siempre el orgullo de todo el Partido, el pueblo y el ejército. El papel de liderazgo del Partido mantiene su valor para la causa de construcción y defensa nacional en la actualidad./.
Tras el Acuerdo de Ginebra, firmado en 1954, el territorio de Vietnam fue dividido temporalmente en dos. El Norte logró la independencia absoluta y entró en un periodo de transición al socialismo, mientras el Sur permanecía bajo el doble yugo de los imperialistas estadounidenses y sus lacayos.
En este contexto, el Partido Comunista fijó dos tareas estratégicas: llevar a cabo la revolución socialista en el Norte y liberar el Sur de la administración de Estados Unidos y el gobierno títere, en pos de la reunificación nacional.
En la Ofensiva General de Primavera 1975, con la determinación de librar por completo la región sureña, tras evaluar la situación, el Partido eligió correctamente la estrategia y los objetivos ofensivos principales, lo que marcó un viraje fundamental del escenario de la guerra.
Durante la resistencia contra Estados Unidos, el Partido organizó y gradualmente llevó la guerra popular a su máximo desarrollo, al movilizar la participación de todo el pueblo en la lucha contra los invasores; puso en juego la fuerza combinada y de la retaguardia del norte, que luchó, construyó y proveyó recursos humanos y materiales para el frente del sur.
El Partido aplicó consistente y creativamente la idea de que el camino revolucionario del Sur debe ser un proceso revolucionario radical, con dos fuerzas principales: la fuerza política y la fuerza armada, combinando la lucha militar con la política y la diplomática, la guerra de guerrillas y la guerra regular.
La Ofensiva General de Primavera 1975 fue la culminación de una combinación de ofensiva y rebelión destinada a derrotar y desintegrar a toda la fuerza enemiga, poniendo fin a la guerra en poco tiempo, y demostrando el talento militar, la creatividad y la decisión acertada del Partido.
El acontecimiento es siempre el orgullo de todo el Partido, el pueblo y el ejército. El papel de liderazgo del Partido mantiene su valor para la causa de construcción y defensa nacional en la actualidad./.
VNA