Tras una reunión a puerta cerrada sobrela conflictiva situación en el estado myanmeno de Rakhine, la cual obligó a másde 380 mil musulmanes de la etnia minoritaria Rohingya a huir a Bangladesh, elConsejo condenó la violencia e instó al gobierno de Myanmar a permitir elacceso de voluntarios humanitarios.
El secretario general de las NacionesUnidas, Antonio Guterres, también llamó a las autoridades de Myanmar a detenerlos movimientos militares en Rakhine y mantener el principio de la supremacíade la ley. – VNA