El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el primer ministro de Nueva Zelanda, John Key, abogaron a China por respetar el derecho internacional en las disputas en el Mar Oriental.

En sus anuncios tras las conversaciones en Washington con John Key, de visita en Estados Unidos, Obama expresó su rechazo a los actos que provocan más tensiones en el Mar del Este y podrán perjudicar a la navegación y las actividades comerciales en la región.

Llamó a Beijing a resolver las divergencias mediante vías pacíficas, escaladas tras la instalación ilegal de China del inicio de mayo pasado de la perforadora petrolífera Haiyang Shiyou-981 dentro de la zona económica exclusiva de Vietnam.

Por su parte, John Key compartió la postura de Washington al reiterar la suma importancia de respetar las leyes internacionales, como la Convención de la ONU sobre el Derecho en el Mar (UNCLOS) de 1982.

China emplazó de forma perversa la Haiyang Shiyou-981, escoltada por numerosos barcos armados, naves militares y aviones de combate, en un lugar a 80 millas marinas dentro de la zona económica exclusiva de Vietnam.

Esos navíos acompañantes realizaron agresivos ataques, como el uso de cañones de agua de alta presión y choques físicos a las embarcaciones oficiales y civiles de Vietnam, causando múltiples lesiones humanas y pérdidas materiales.

Tal peligrosa instalación es una clara y grave violación de las leyes internacionales, sobre todo de la UNCLOS y la Declaración de Conducta en el Mar Oriental firmada por el propio Estado chino. También amenaza directamente la paz, la estabilidad, la seguridad y la libertad de navegación en el Mar Oriental.-VNA