En el evento, auspiciado por el Centro de Estudio de Género, Familia yMedio Ambiente en Desarrollo (CGFED, inglés) y la Red de Acción deBasilea en Asia-Pacífico, los participantes también intercambiaron lasexperiencias de algunos países, incluidos Suiza e Indonesia, en lasuscripción de ese tratado.
De acuerdo conCythia Indirani, del Centro del Sudeste Asiático sobre BBA, los“desechos electrónicos” o “residuos de aparatos eléctricos yelectrónicos” contienen más de mil compuestos de diferentes sustanciastóxicas, que afectan severamente al medio ambiente.
Las toxinas en esos productos obsoletos son difíciles de identificarcuando se dispersan en el entorno y tienen riesgos para la salud de lapoblación, tales como cáncer, enfermedades respiratorias,cardiovasculares y mentales, reiteró Indirani.
Los delegados reiteraron el significado de la Convención de Basilea comoun marco legal para el control de los movimientos transfronterizos delos desechos peligrosos y su disposición, pero advirtieron sobre unflujo de residuos de aparatos electrónicos en Vietnam.
En vigor desde el 5 de mayo de 1992, el Convenio de Basilea es unarespuesta de la comunidad internacional a los problemas causados por losdesechos peligrosos para el hombre y el ambiente debido a suscaracterísticas tóxicas, explosivas, corrosivas, inflamables oinfecciosas.
Como una propuesta de enmienda aeste tratado, la BBA pretende prohibir la exportación con cualquiermotivo (eliminación final o reciclaje) de residuos peligrosos desde lospaíses desarrollados hacia las naciones en desarrollo.
Vietnam ratificó el Convenio de Basilea el 13 de marzo de 1995, como parte de sus esfuerzos en la protección ambiental. – VNA