Hanoi, (VNA)- La reciente firma del Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y Vietnam (EVFTA) abre oportunidades a los productos agrícolas del país indochino para acceder a los mercados de los 28 países miembros del bloque comunitario, valoraron expertos.   
 
Valoran que el EVFTA abre puertas de Europa a productos agricolas de Vietnam hinh anh 1Foto ilustrativa (Fuente: VNA)
Le Thanh Hoa, subjefe del Departamento de Procesamiento y Desarrollo del Mercado Agrícola, se refirió a la alta demanda de frutas y verduras de la UE, e indicó que, para aprovechar esas ventajas, las empresas nacionales deben estudiar minuciosamente los estándares de la Unión Europea en relación con el asunto de calidad e higiene alimentaria.  

Hoa se refirió al hecho de que ese acuerdo regula límites máximos de residuos de plaguicidas en productos destinados a la alimentación,  y en tal sentido los productores vietnamitas deben velar por el cumplimiento de ese requerimiento. 

Por su parte el subdirector del Instituto de Políticas y Estrategia para el desarrollo de agricultura, Tran Cong Thang, comentó que Vietnam debe cumplir además las reglas de origen de los productos, así como  otros requisitos  referidos a la propiedad intelectual y la transparencia de la información.  

En este sentido, es necesario establecer canales de distribución efectiva para competir con las importaciones de la Unión Europea, señaló.

Con el EVFTA, productos principales de Vietnam como arroz, café, pimienta, verduras y frutas estarán exentos de impuestos dentro de un período de tres a siete años.

Mientras, un 60 por ciento de los alimentos para la ganadería se beneficiarán de la misma política una vez que entre en vigor el acuerdo comercial, y el grupo de productos frescos y congelados seguirá un itinerario de reducción en siete años.    

Según Do Ha Nam,  vicepresidente de la Asociación de Café-Cacao de Vietnam, el valor de las exportaciones del café vietnamita aumentará con la firma del EVFTA. 

En este contexto, señaló, los agricultores deben desarrollar una forma de cultivo sostenible, que cumpla el estándar internacional. Además, es importante la coordinación estrecha entre las empresas nacionales, y entre las mismas con los distribuidores europeos, con el fin de elevar el valor del grano. –VNA