Con motivo del Festival de las Linternas (Tet Nguyen Tieu o Tet Thuong Nguyen), el destacado artesano Nguyen Tat Kim Hung, guardián del incienso del Templo Nguyen Khiet Linh Tu en el número 102 de la calle Hang Bac en Hanoi, realiza el ritual de Hau Dong, un medio de comunicación con las deidades mediante una médium, o encarnaciones de las mismas a fin de pronunciar oráculos, curar enfermedades e invocar la protección divina a los seguidores del Culto a la Diosa Madre. La celebración de Hau Dong, conocido también como Entrar en entrance, dota de una sutil armonía entre elementos espirituales y los cantes populares. (Fuente: Vietnam+)
La persona que actúa como médium se denomina Thanh Dong, si es un hombre se le llama Cau, Cô o Ba Dong si es una mujer. Cau suele ir vestido con ropaje de seda y maquillado (el pelo puede ser largo como una mujer). En el transcurso de una sesión de Hau Dong, hay muchos Gia, que son dioses, espíritus o personajes divinos a ser encarnados. Al médium se le cubre con un paño de seda roja cuando éste pasa de encarnar un personaje a otro, al mismo tiempo que varios asistentes le cambian la túnica, ofrendas y demás complementos que corresponden al siguiente espíritu. (Fuente: Vietnam+)
Los trajes de los dioses son muy diversos en estampados y texturas, pero se pueden identificar a través de los colores. Cada color representa un dominio del universo. El cielo está representado por el rojo (Thien Phu), la tierra es amarilla (Dia Phu), los ríos y mares son blancos (Thoai Phu), las montañas y bosques son verdes (Thuong Ngan). En la foto, el artesano Kim Hung, que adora a la Diosa Nguyen Khiet Linh Tu. Con servicios meritorios al pueblo y al país, la Diosa fue honrada como Princesa Bach Hoa (Diosa Madre de la montaña Dum, en la provincia norteña de Tuyen Quang). (Fuente: Vietnam+)
Los Thanh Dong, personas que actúan como médiums, siempre tienen asistentes para ayudar a cambiar y arreglar los trajes después de cada Gia, que son dioses, espíritus o personajes divinos a ser encarnados. Al médium se le cubre con un paño de seda roja cuando éste pasa de encarnar un personaje a otro. A veces Thanh Dong actúa como un alto General con toda su majestuosidad, otras veces como una encantadora muchacha bailarina. Las danzas también varían según las características de un Gia particular. Los médiums son personas que se consideran dotadas de facultades paranormales, que les permiten actuar como intermediarias en fenómenos parapsicólogos o conexiones entre el ser humano y el mundo espiritual. (Fuente: Vietnam+)
El Superior Magistrado del Cielo (Thuong Thien), en nombre de las Tres Cortes de la Diosa Madre, gobierna el cielo. El sistema de honra de la Diosa Madre está constituido por 60 Dioses, de los cuales el Supremo es el jerarca Rey del Cielo, luego los inferiores son en orden la Diosa Madre-cortesanos-soldados, cortesanos, Señor Hoang, la Tía, el Tío-los cinco Tigres, y el más bajo “Lot”. Según las leyendas, el Señor Hoang de primera categoría era un general del Rey Le Loi, el primer rey de la dinastía Le. El Señor Hoang de segunda categoría en la provincia de Thanh Hoa se asociaba al cortesano Trieu Tuong, quién ayudó al pueblo a explorar nuevos terrenos. (Fuente: Vietnam+)
El segundo puesto en el sistema de honra de la Diosa Madre pertenece al Gran Magistrado de las Montañas, a cargo de las montañas y los bosques. Luego, los inferiores son en orden el Señor Hoang, el Señor Hoang de segunda categoría, y el Señor Hoang Bo de tercera categoría. Según las leyendas, el Señor Hoang de primera categoría era un general del Rey Le Loi, el primer rey de la dinastía Le. El Señor Hoang de segunda categoría en la provincia de Thanh Hoa se asociaba al cortesano Trieu Tuong, quién ayudó al pueblo a explorar nuevos terrenos. El Señor Hoang Bo de tercera categoría en la provincia de Ha Nam fue quien asistió al Rey por entonces en la lucha contra los enemigos invasores. (Fuente: Vietnam+)
Le sigue el Gran Magistrado de Agua, que gobierna los ríos y mares. Surgida en un contexto de lucha por sobrevivir y frente a la naturaleza muchas veces devastadora, la represión del régimen gobernante y los enemigos invasores, el culto a la Diosa Madre una tradición vietnamita de larga historia, se ha adaptado a los cambios de la sociedad. En tanto que agricultores de arroz en un clima tropical monzónico, para vivir los vietnamitas dependen estrechamente de la naturaleza, por lo que honran los espíritus de la Tierra, el Agua, el Arroz, y según el concepto de los elementos Yin-Yang, que simbolizan a la Madre. (Fuente: Vietnam+)
En el cuarto lugar, se encuentra el Gran Magistrado de Comisionado, que según cuenta la leyenda dice fue el cuarto hijo del Rey Bat Hai Dong Dinh. La adoración a la Diosa Madre refleja la armonía en la cultura popular, no sólo representa la cara cultural vietnamita sino también la de las otras etnias, ya que los Viet también los honran. Es sin duda la interculturalidad que influye en el estilo de vestir, las costumbres o los cantes populares. Ese culto nació en la cuna de la cultura vietnamita, cuya existencia con sus peculiaridades y atractivos ya lleva miles de años en la vida espiritual del pueblo. Consigue la armonía entre los elementos espiritual y artístico a través de los cantes, brindando confianza e inspiración a quién lo practica. (Fuente: Vietnam+)