Hanoi (VNA) El viceprimer ministro vietnamita, Ho Duc Phoc, quien también es jefe del Comité Directivo de Gestión de Precios, presidió una reunión para evaluar los resultados y el funcionamiento de la gestión de precios durante los últimos siete meses, y definir la estrategia para el resto de 2025.
Según el viceministro de Finanzas, Le Tan Can, durante este periodo los precios han fluctuado en línea con las dinámicas del mercado.
En el primer trimestre de 2025, los precios subieron al inicio del año por el Tet (Año Nuevo Lunar), pero comenzaron a bajar gradualmente desde marzo. En el segundo trimestre, el índice de precios al consumidor (IPC) aumentó ligeramente en abril y mayo, y creció más fuerte en junio (0,48%) debido a la subida de los costos de materiales de construcción como ladrillos, arena, piedra y gasolina, afectados por las variaciones en el mercado mundial de combustibles. En comparación con el mismo periodo del año pasado, se estima que el IPC en los primeros siete meses aumentó entre un 3,2% y un 3,3%, dentro del rango de control inflacionario fijado por el Gobierno (4,5%-5%), contribuyendo así al impulso del crecimiento económico.
El Ministerio de Finanzas anticipa que en los meses restantes de 2025 habrá presiones inflacionarias por el alza de precios, aunque otros factores ayudarán a mitigarlas. Por ello, se proyecta un aumento del IPC entre 3,7% y 4,0% durante los últimos cinco meses del año, acorde con las estimaciones de inflación promedio de organismos internacionales (2,9%-4,2%). El objetivo es mantener el IPC anual en un rango de 4,5% a 5%.
Durante la reunión, los integrantes del Comité reconocieron los resultados positivos en la gestión y operación de precios durante los primeros siete meses y propusieron medidas prácticas y efectivas para un desarrollo económico más rápido y sostenible.
El vicepremier Ho Duc Phoc valoró las opiniones detalladas y constructivas de los miembros y pidió al Ministerio de Finanzas seguir perfeccionando el informe y aplicar las medidas necesarias. Recalcó que un control efectivo de la inflación es clave, ya que sin él, el crecimiento económico difícilmente se traducirá en beneficios reales para la vida de las personas y para las actividades productivas y comerciales.

Solicitó a los ministerios, organismos y localidades prestar atención especial a la evolución de precios de productos básicos como la gasolina, electricidad, arroz y carne, y preparar soluciones de gestión oportunas y adecuadas. El Ministerio de Construcción junto con el de Agricultura y Medio Ambiente, en coordinación con provincias y ciudades, deben elaborar medidas fundamentales y coordinadas para manejar el mercado inmobiliario, evitando fluctuaciones que perjudiquen la economía y la sociedad.
Además, el subjefe del Gobierno expresó su opinión sobre la gestión de la oferta monetaria, la estabilidad del tipo de cambio del dong frente al dólar estadounidense, y el control de precios de electricidad, materiales de construcción e insumos productivos. Subrayó la necesidad de implementar soluciones coordinadas que mantengan el IPC en niveles razonables, controlen la inflación y fomenten un crecimiento económico sostenible.
Encomendó a los ministerios y departamentos preparar un plan de gestión de precios para los bienes bajo su responsabilidad para 2026, con fecha límite en octubre de 2025, para anticiparse a la gestión. Al mismo tiempo, pidió un seguimiento cercano de la evolución de precios en el mercado interno, sobre todo en bienes y servicios esenciales, para regular la oferta y demanda, estabilizar el mercado y prevenir escasez o subidas excesivas.
También insistió en reforzar la declaración y publicación transparente de precios, difundir información relevante y controlar estrictamente los aumentos injustificados que desestabilicen el mercado. La política fiscal debe estar en estrecha coordinación con la monetaria y otras políticas para estabilizar la macroeconomía, controlar la inflación y asegurar el equilibrio económico general.
Enfatizó la importancia de promover la transparencia y difusión de información sobre precios y la gestión gubernamental, para limitar expectativas inflacionarias, estabilizar la confianza de consumidores y empresas, contribuir a la estabilidad social y fomentar el desarrollo económico./.