La diversidad geográfica, la milenaria historia y una cultura singular conceden a Vietnam una riqueza culinaria admirada por gastrónomos en todo el mundo, un tesoro que podrá servir como gran propulsor para el desarrollo del turismo nacional.
Durante su visita en mayo pasado a Vietnam, Barack Obama creó un espacio en su ocupada agenda para degustar uno de los platos más emblemáticos del país en un pequeño y humilde restaurante en el centro de Hanoi.