Hanoi (VNA)- Vietnam y Nueva Zelanda acordaron hoy elevar sus relaciones al nivel de Asociación Estratégica Integral, marcando el medio siglo del establecimiento de los nexos diplomáticos bilaterales.
Esa decisión quedó plasmada en la Declaración Conjunta emitida durante la visita oficial del primer ministro neozelandés, Christopher Luxon, a Vietnam del 25 al 28 del presente mes, por invitación de su homólogo anfitrión, Pham Minh Chinh.
Durante su estancia aquí, además de las conversaciones con su par Pham Minh Chinh, el jefe del Gobierno de Nueva Zelanda se reunió con el secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam; el presidente de la República, Luong Cuong; y el titular de la Asamblea Nacional, Tran Thanh Man.
En el próximo año, ambas partes diseñarán un programa de acción común para establecer iniciativas específicas dentro del marco de la asociación estratégica integral, centrándose en fortalecer los cinco pilares clave que son la colaboración política; defensa, seguridad y cooperación marítima; economía, comercio e inversión; respuesta al cambio climático, ciencia y tecnología; y educación e intercambios pueblo a pueblo.
Ambas partes determinaron que el objetivo de su asociación estratégica integral es fortalecer el marco de cooperación existente, contribuyendo a la paz, la estabilidad y la prosperidad tanto a nivel nacional como global.
Convinieron en seguir fortaleciendo los intercambios entre los líderes de alto nivel y contactos en foros bilaterales, regionales y multilaterales, además de incrementar la asistencia en cuestiones multilaterales, subregionales y regionales a través de canales gubernamentales y parlamentarios.
Reafirmaron su compromiso con el papel central de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), así como el rol fundamental de la agrupación en la estructura regional emergente, una abierta, transparente, inclusiva y basada en reglas, construida sobre los mecanismos liderados por la ASEAN, que protegen la soberanía y los intereses de todos los países.
Pactaron profundizar aún más la cooperación entre las Cancillerías de ambos países y fortalecer la colaboración diplomática mediante el fomento de intercambios regulares sobre cuestiones estratégicas entre los institutos de investigación de las dos naciones.
En cuanto a la asistencia en defensa, seguridad y cooperación marítima, sobre la base del Plan de cooperación en defensa recientemente acordado, ambas partes continuarán promoviendo el diálogo a través de los mecanismos existentes, y explorarán la posibilidad de ampliarla en áreas potenciales, en línea con los nexos Vietnam-Nueva Zelanda, así como con las capacidades, necesidades e intereses de cada país.
Ambas partes subrayaron la importancia de compartir información en cuestiones bilaterales, regionales y globales de interés común, como el cambio climático, el gobierno electrónico, las contribuciones conjuntas al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la ciencia y la tecnología; así como en la lucha contra el terrorismo, el narcotráfico, el lavado de dinero y la trata de personas.
Acogieron con satisfacción la organización del primer Diálogo Marítimo, marcando el comienzo de un debate regular sobre cómo abordar los desafíos marítimos y buscar oportunidades para fortalecer la cooperación marítima civil mediante el intercambio de conocimientos, el desarrollo de capacidades y la formación.
Las dos naciones se comprometen a continuar trabajando de forma conjunta para implementar otros programas de cooperación marítima.
Asimismo, la integración económica, comercial e inversora es un área central en la asociación estratégica integral entre ambos países, que aspiraran a alcanzar un comercio bilateral de tres mil millones de dólares para 2026.
Las dos partes ratificaron su compromiso de fortalecer la integración económica regional y apoyar el sistema de comercio multilateral basado en reglas, libre, abierto, transparente e inclusivo, incluida la reforma de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Confirmaron su compromiso de implementar de manera plena y efectiva el Acuerdo Integral y Progresivo de Asociación Transpacífico (CPTPP), el Acuerdo de Asociación Económica Integral Regional (RCEP) y el Acuerdo para el establecimiento de la Zona de Libre Comercio ASEAN - Australia - Nueva Zelanda (AANZFTA).
En cuanto al trabajo en la respuesta al cambio climático, ciencia y tecnología, Nueva Zelanda recalcó que seguirá ampliando la cooperación a través de la ayuda oficial al desarrollo bilateral y regional, especialmente en áreas en las que tiene fortalezas y que son prioritarias para Vietnam, como el desarrollo de recursos humanos de alta calidad, el empoderamiento de las mujeres y la igualdad de género, el cambio climático y la autosuficiencia económica, la gestión sostenible del agua, la agricultura y la gestión de riesgos de desastres.
Ambas partes rubricaron un memorando de entendimiento sobre la respuesta al cambio climático con el fin de robustecer la adaptación y mitigación de la variación climática, incluida la colaboración en el mercado de carbono.
Estipularon reforzar la cooperación en educación e intercambios pueblo a pueblo, un área clave en las relaciones de asociación estratégica integral. Nueva Zelanda se comprometió a aumentar el apoyo a la formación de funcionarios de Vietnam, incluida la capacitación en inglés.
Ambas partes subrayaron la importancia del papel central de la ASEAN en el fomento del desarrollo en la subregión del Mekong y reiteraron su decisión de promover más el desarrollo pacífico, próspero, inclusivo y sostenible en esa zona a través de la Comisión del Río Mekong (MRC), la Estrategia de Cooperación Económica Ayeyawady - Chao Phraya - Mekong (ACMECS), los Amigos del Mekong (FOM) y otros mecanismos e iniciativas relacionadas.
Recalcaron su compromiso con el multilateralismo y el sistema internacional basado en reglas, como se establece en la Carta de la ONU y el derecho internacional, considerándolo como una base importante para fortalecer la paz, la seguridad y la prosperidad.
En particular, destacaron la obligación de todos los países de cumplir con el derecho internacional y reafirmaron la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 (UNCLOS).
Expresaron su profunda preocupación por los recientes desarrollos en el Mar del Este y llamaron a las partes involucradas a ejercer moderación, evitar acciones que eleven las tensiones o disminuyan la confianza, así como resolver disputas por medios pacíficos, respetando plenamente los procesos diplomáticos y legales, sin el uso de la fuerza o amenazas con utilizarla, conforme al derecho internacional, incluida la UNCLOS./.
