Hanoi (VNA) Con los logros históricos, la posición y la fuerza acumuladas en el proceso de Doi moi (Renovación), Vietnam está listo para entrar en la era del ascenso de la nación, la de aceleración y avance, comenzando con un acontecimiento importante que es el XIV Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam (PCV).
Un legado de 40 años de resiliencia y transformación
Como señaló el secretario general del PCV, To Lam, el XIV Congreso Nacional del Partido significa el amanecer de una nueva era, construida sobre el notable éxito de los 40 años de renovación de Vietnam, un período definido por el trabajo incansable, la innovación y los logros históricos.
Como resultado, desde un país pobre, atrasado, subdesarrollado y aislado por las sanciones, Vietnam ha convertido en un país en desarrollo de ingresos medios profundamente integrado a la economía global.
El tamaño de la economía de Vietnam en 2023 aumentó 96 veces en comparación con 1986. El país está en el grupo de las 40 economías más grandes del mundo; tiene relaciones diplomáticas con 194 países y territorios en los cinco continentes; y ha establecido asociación de cooperación estratégica y asociación estratégica integral con todas las principales potencias en el orbe.
El primer ministro Pham Minh Chinh destacó que, a pesar de las incertidumbres y los desafíos globales, la economía nacional en 2024 siguió recuperándose con fuerza, gracias a la gran determinación, los grandes esfuerzos y las acciones drásticas de todo el sistema político, el pueblo y la comunidad empresarial bajo el liderazgo del PCV.
A fines del año pasado, Vietnam no solo cumplió, sino que superó los 15 objetivos clave, logrando resultados notables en múltiples sectores, lo que le valió el reconocimiento tanto del público como de la comunidad mundial. Como resultado, la posición y la influencia globales del país se han elevado aún más.
Vietnam se ubica entre las economías de más rápido crecimiento de la región y del mundo. En 2024, la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del país alcanzó una tasa impresionante del 7,09%, con un tamaño económico de aproximadamente 470 mil millones de dólares. La reestructuración económica sigue avanzando positivamente, con una calidad de crecimiento mejorada y una productividad laboral que aumentó un 5,7%. Su índice de libertad económica también subió 13 puestos, ubicándose en el lugar 59 entre 176 países y territorios.
El país ha sido ampliamente elogiado por su control eficaz de la inflación y su estabilidad macroeconómica, incluso en medio de la turbulencia mundial. Esto ha consolidado la reputación de Vietnam como un destino seguro y atractivo para empresas, inversores y socios internacionales. Cabe destacar que Vietnam se encuentra entre los 15 principales países en desarrollo en cuanto a atracción de inversión extranjera directa (IED), con un valor combinado de 40 mil millones de dólares, incluidos 25 mil millones de dólares desembolsados.
Como una de las 20 principales economías del mundo en términos de escala comercial, con 17 acuerdos de libre comercio (ALC) firmados, Vietnam se ha convertido en un eslabón clave en las cadenas de suministro globales y regionales. El país también está experimentando una fuerte transformación hacia una economía digital, una economía verde e industrias ecológicas de alta tecnología. Vietnam se ha consolidado como un actor crucial en la industria mundial de semiconductores, atrayendo a los principales gigantes tecnológicos. En 2024, el valor de la marca nacional de Vietnam alcanzó los 507 mil millones de dólares, ocupando el puesto 32 entre 193 países.
Los avances estratégicos han producido un progreso tangible, mejorando significativamente la calidad de vida de sus 105 millones de ciudadanos. Las tasas de pobreza han disminuido drásticamente y el país ha alcanzado los Objetivos de Desarrollo del Milenio antes de lo previsto.
Prioridades principales en la nueva era
Para lograr con éxito el objetivo de 2030 de convertirse en un país en desarrollo con una base industrial moderna e ingresos medianos altos y la visión de 2045 de una nación socialista desarrollada de ingresos altos, el secretario general To Lam enfatizó la necesidad de realizar el máximo esfuerzo a partir de 2025.
Se necesitan hacer los máximos esfuerzos en aras de crear factores innovadores en la atracción de inversiones, impulsar fuertemente las actividades de producción, negocios y servicios, y trabajar por alcanzar un crecimiento económico de al menos el 8% o más, creando así una base sólida para avanzar aún más en 2026, puntualizó.
Desde ahora hasta 2030 es el período, la oportunidad estratégica y la etapa de sprint de Vietnam, apuntó.
Sobre la base de la dirección del Secretario General, el primer ministro Pham Minh Chinh subrayó la importancia de revisar los objetivos y tareas quinquenales y promover los resultados alcanzados, así como hacer mayores esfuerzos para cumplir los objetivos restantes, asegurando la mayor finalización posible del plan quinquenal 2021-2025..
En concreto, hizo hincapié en la importancia de priorizar la promoción del crecimiento asociado a la estabilidad macroeconómica, controlar la inflación y asegurar las grandes balanzas de la economía.
Asimismo, resulta necesario elaborar escenarios en aras de conseguir los objetivos de crecimiento, centrándose en renovar los motores de crecimiento tradicionales (inversión, consumo, exportación) y al mismo tiempo, crear avances para impulsar nuevos motores de crecimiento, indicó.
Además, abordó el impulso de la reorganización y racionalización del aparato político de manera más fuerte y eficiente; la continuación de construir y perfeccionar las instituciones; la promoción del desarrollo de infraestructura estratégica y el desarrollo de los recursos humanos, especialmente los de alta calidad.
La ciencia, la tecnología y la innovación son también una de las fuerzas impulsoras del desarrollo en la nueva era, destacó.
Para adaptarse a los rápidos cambios en el contexto nacional e internacional, especialmente la Cuarta Revolución Industrial, el ministro de Planificación e Inversión, Nguyen Chi Dung, dijo que es preciso mejorar la capacidad de producción en industrias y campos de alto nivel.
El funcionario mencionó una serie de industrias fundamentales, emergentes y auxiliares y enfatizó en la necesidad de ser gradualmente autosuficiente en ciencia y tecnología, a fin de participar de manera proactiva y efectiva en la cadena de valor global./.
