Hanoi (VNA)- Vietnam debe mantener una alta vigilancia ante la expansión de la Peste Porcina Africana (PPA) en el país, la cual podría afectar económicamente a alrededor de 10 millones de personas, recomendó un funcionario de la FAO.
Albert J. Lieberg, máximo representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en la nación indochina, hizo tal afirmación en una entrevista concedida a la Agencia Vietnamita de Noticias.
El funcionario elogió la reacción rápida del gobierno de este país ante la epidemia, con la promulgación desde noviembre pasado de un plan de acción en respuesta a esta emergencia.
Vietnam, señaló, estableció grupos de trabajo y un Comité Interministerial para dirigir la labor de prevención y lucha contra esta enfermedad, además de impulsar el sacrificio de cerdos, y controlar estrictamente el transporte de esos animales.
Además, agregó, el gobierno aprobó recompensas a los criadores que deban sacrificar cerdos, con el pago de un equivalente al 80 por ciento del precio del animal en el mercado.
Según Lieberg, en Vietnam hay unos dos millones 600 mil hogares que crían cerdos, y multiplicados por tres o cuatro integrantes de cada familia, la cifra podría llegar a 10 millones de personas afectadas económicamente por el brote, en el peor de los casos.
Sus ingresos dependen principalmente de varias fuentes, pero aún así, la cría de cerdos juega un papel significativo, indicó.
En este sentido, dijo, es importante seguir de cerca la situación, definir el nivel de emergencia y el tiempo en que debe darse el alerta.
La FAO hará todo lo posible para asistir al gobierno y el pueblo vietnamitas, sobre todo a las familias damnificadas en zonas rurales, enfatizó el funcionario.
Si esta enfermedad infecciosa se contagiara a otros países vecinos o se extendiera a toda la región, podría declararse una emergencia que deberán abordar de manera colectiva los gobiernos de las naciones afectadas, agregó. – VNA
Albert J. Lieberg, máximo representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en la nación indochina, hizo tal afirmación en una entrevista concedida a la Agencia Vietnamita de Noticias.
El funcionario elogió la reacción rápida del gobierno de este país ante la epidemia, con la promulgación desde noviembre pasado de un plan de acción en respuesta a esta emergencia.
Vietnam, señaló, estableció grupos de trabajo y un Comité Interministerial para dirigir la labor de prevención y lucha contra esta enfermedad, además de impulsar el sacrificio de cerdos, y controlar estrictamente el transporte de esos animales.
Además, agregó, el gobierno aprobó recompensas a los criadores que deban sacrificar cerdos, con el pago de un equivalente al 80 por ciento del precio del animal en el mercado.
Según Lieberg, en Vietnam hay unos dos millones 600 mil hogares que crían cerdos, y multiplicados por tres o cuatro integrantes de cada familia, la cifra podría llegar a 10 millones de personas afectadas económicamente por el brote, en el peor de los casos.
Sus ingresos dependen principalmente de varias fuentes, pero aún así, la cría de cerdos juega un papel significativo, indicó.
En este sentido, dijo, es importante seguir de cerca la situación, definir el nivel de emergencia y el tiempo en que debe darse el alerta.
La FAO hará todo lo posible para asistir al gobierno y el pueblo vietnamitas, sobre todo a las familias damnificadas en zonas rurales, enfatizó el funcionario.
Si esta enfermedad infecciosa se contagiara a otros países vecinos o se extendiera a toda la región, podría declararse una emergencia que deberán abordar de manera colectiva los gobiernos de las naciones afectadas, agregó. – VNA